El objetivo de coberturas como esta, dice este periodista mexicano, es la de contar historias y tratar de entender el conflicto a pesar de la magnitud que implica la invasión, los enfrentamientos militares y los más de cuatro millones de desplazados. No es la primera vez que a González hace periodismo de campo en tierras de combate, también ha realizado coberturas en Oriente Medio, con el conflicto árabe-israelí, además de enfrentamientos internos en Venezuela, Colombia y Bolivia.
Pero uno de los retos más importantes de su carrera es el que enfrentó hace unos días en Ucrania, Moldavia y Rumania, donde reportó desde campos de refugiados y espacios en manos del ejército, pero, sobre todo, desde donde se encuentran los ciudadanos de este país invadido por los rusos. “Vi mucha gente confundida que no entendía por qué se daba este paso tan grande en una escalada armamentista que parecía que no iba a llegar. Vi algo de sorpresa en la gente que todavía no comprendía lo que estaba pasando, personas con la vida rota que salía de bombardeos y ciudades sitiadas”, nos contó Mario, presentador de CNN.