En una audiencia que se realizará mañana a las 13:30 horas en el Centro de Justicia Penal Federal en el reclusorio Norte se decidirá si el ex director de Pemex queda libre.
El pasado sábado, Emilio Lozoya celebró que un juez ordenó su liberación por la compraventa de una planta chatarra de fertilizantes, aunque debía seguir en prisión preventiva por su rol en la red de sobornos de la brasileña Odebrecht. Esto podría cambiar mañana.
Un Tribunal federal ordenó que se realice otra audiencia, mañana a las 13:30 horas, en la que un juez deberá determinar si es procedente dejarlo en prisión preventiva o no; es decir, si puede enfrentar en libertad el caso Odebrecht porque, a pesar de que deje la cárcel, el proceso seguirá en marcha.
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Lo que argumentó el Tribunal Federal fue que la decisión de encarcelar Lozoya no estuvo bien fundamentada por parte del parte del juez de control Artemio Zúñiga, por lo que la audiencia que tendrá lugar en el Centro de Justicia Penal Federal en el reclusorio Norte será para revisar la petición de la FGR de someterlo al encierro preventivo.
Desde el comienzo, Emilio buscó enfrentar los procesos en libertad, y por el momento está a punto de enfrentar un juicio oral por los delito de los que se le acusan, que son asociación delictuosa, cohecho y operaciones con recursos de procedencia ilícita. Existen dos escenarios de lo que podría pasar mañana.
La primera es que sí el juez Zúñiga (u otro distinto que lleve a cabo la audiencia) decide ya no dictar la prisión preventiva, significaría que Lozoya obtendría su libertad inmediata, dado que ya el sábado logró también que se le retirara la misma medida que se le había impuesto por el caso de Agronitrogenados.
El segundo proceder sería que el juez determine que es procedente la prisión preventiva justificada, pero deberá fundamentar adecuadamente su decisión, que supuestamente no se hizo bien el 3 de noviembre pasado. El ex jefe de Petróleos Mexicanos (2012-2016) fue detenido a inicios de 2020 en España.
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¿Por qué detuvieron y extraditaron a Emilio Lozoya?
En 2020, México extraditó al ex funcionario como testigo protegido de la Fiscalía a cambio de inculpar a otros políticos, pero en noviembre ingresó en prisión preventiva tras protagonizar un escándalo por cenar en un restaurante de lujo en Polanco; que detallamos en la entrevista con la periodista Lourdes Mendoza.
Lozoya presuntamente recibió 10,5 millones de dólares en sobornos de Odebrecht durante la campaña y la presidencia de Enrique Peña Nieto (2012-2018), a quien denunció, junto al ex secretario de Hacienda, Luis Videgaray, y otros políticos del Partido Acción Nacional (PAN), por también recibir seis millones de la constructora brasileña.
Valiéndose de Emilio, según la FGR, los recursos fueron depositados en una cuenta en las Islas Vírgenes Británicas y retirados en efectivo para Peña Nieto y Videgaray, quienes habrían ordenado la entrega de los recursos a diversos acusados. Emilio podría alcanzar una condena de 39 años de prisión.
Su mamá Gilda Margarita Austin y Solís también fue acusada por la FGR, la cual pretende una sentencia de 25 años de prisión. Hasta ahora los abogados del ex funcionario no han logrado un criterio de oportunidad, pese a que ofreció garantizar con un pago de 5 millones de dólares la reparación del daño causado por los casos.