El empresario tapatío Antonio Pérez Garibay asegura que su casa en Guadalajara es la única que tiene suite presidencial y no lo dice nada más porque sí. El ahora precandidato de Morena a la alcaldía de la Perla Tapatía es amigo de todos los presidentes de México vivos, incluyendo a Andrés Manuel López Obrador, y lo platica sin un toque de presunción.
Por eso, nos cuenta en exclusiva, hace unos años y sin planearlo, dio asilo por unas horas al ex mandatario Ernesto Zedillo Ponce de León.
A finales de los 90, Ernesto Zedillo todavía era presidente, le tocó dormir en su casa de Guadalajara debido a la inundación de un aeropuerto que le impidió regresar a la Ciudad de México.
“Eran las 9 de la noche cuando el presidente Zedillo me habló, pero yo estaba a una hora de mi casa porque era domingo. Él me dijo que me esperaba, así que le pregunté si tenía hambre y me contestó que sí. Venía con el general Corona, del Estado Mayor presidencial, y los llevé a La Minerva, a cenar a un restaurante italiano”.
Cenaron risotto y salmón, y se tomaron un par de cervezas, recuerda el empresario. La comitiva del ex presidente estaba buscando un lugar para alojarlo, pero un evento masivo del sector de transportes había llenado los principales hoteles de la ciudad, así que el papá de Checo Pérez le ofreció su casa.
Cuenta Antonio Pérez que cuando le dijo al priista que en su casa ya se habían quedado algunos presidentes, Zedillo le contestó; “¡¿Quiénes?!”, (prefirió no compartirnos el nombre de aquel presidente en cuestión), a lo que el presidente Zedillo contestó; “¡Uy, a ver si hay almohadas!”.
Antonio Pérez Garibay también ha recibido en casa a los presidentes panistas Felipe Calderón y Vicente Fox, con quienes tiene una gran amistad. “Tengo también una excelente relación con Martha Sahagún. Hace unos días hablaba con ella y me decía que su nieto de seis años ya está haciendo go karts, así que ya tenemos un piloto más, nieto del ex presidente de la república”.
El empresario asegura que no tiene problemas con las corrientes políticas de sus amigos ex presidentes y mucho menos con los partidos que representan. “Te voy a contar algo un poco difícil, porque al presidente López Obrador no le va a gustar, pero yo nunca voy a negar a mis amigos: este año, el único que me habló para felicitarme por la victoria de Checo fue Felipe Calderón. Me dijo que había apostado por él un día antes de su victoria”.
Antonio está orgulloso de los amigos que ha acumulado a lo largo de su vida, amistades en las que las diferencias ideológicas, religiosas y políticas no tienen importancia. “Tengo amigos que le van a Las Chivas, al América o al Atlas, pero yo le voy a la Selección Mexicana para ser neutral. Soy alguien que jamás va a confrontar, incluso no he perdido a un solo amigo en política aún siendo partidario de Morena”.
El tapatío de acuerdo con el presidente López Obrador y su frase de “primero los pobres” y comparte la idea de que parte de la política es estar bien con todos, pero es consciente de que hay muchos políticos de “mente cerrada y poco cerebro”, como él les llama. “No es mi caso, yo quiero llevar a mi pueblo al éxito, quiero ver a mis tapatíos, como a Checo Pérez, triunfando en todas las áreas. Sí se puede, porque además de Checo, pueden ver a Paola Pérez, mi hija, que es la única representante mujer de un piloto de Fórmula Uno, por ejemplo”, dice.
Hace unos días Antonio Pérez Garibay hizo oficial sus intenciones de gobernar Guadalajara como abanderado de Movimiento Regeneración Nacional.
