"Pedimos una reunión inmediata con representantes plurales de la comunidad cinematográfica de todas las generaciones y géneros posibles para remover cualquier ambigüedad", fue lo que escribió el cineasta Guillermo del Toro ayer, después de que la cuenta oficial del Instituto Mexicano de Cinematografía (Imcine) publicara un comunicado explicando que se realizarán ajustes a gastos operativos para "no afectar los apoyos, estímulos y donativos que otorga el Instituto a través de sus diversos programas".
La respuesta de la institución surgió ante la reacción de la comunidad cinematográfica y artística a la nota del periodista Arturo Magaña Arce en Cinepremiere a propósito de la iniciativa con proyecto de ley que se presentó el pasado miércoles 20 de mayo y que busca derogar los artículos 33, 34, 35, 36, 37 y 38 de la Ley Federal de Cinematografía, con los cuales se extinguiría el Fondo de Inversión y Estímulos al Cine mejor conocido como Fidecine.
Sin embargo, este movimiento legislativo se da después de que el martes 19 de mayo la directora del Imcine, María Novaro asegurara que ni el Fidecine ni el Fondo para la Producción Cinematográfica de Calidad (Foprocine) se extinguirían. Esta acción es parte de la reforma que impulsan diputados de Morena para quitar 44 fideicomisos con el argumento de tener recursos para enfrentar la crisis de salud por el COVID-19 .
Luis Gerardo Méndez también pidió un minuto al coordinador de los diputados de Morena para leer el hilo de Twitter de María Novaro y Epigmenio Ibarra, dueño de la productora Argos Comunicación; hizo un llamado a los senadores a no atentar contra esta industria estratégica.
"Desaparecer Fidecine habla de una ignorancia brutal de quienes lo proponen", escribió el actor Tenoch Huerta para expresar su rechazo.