"Los ricos no están reparando en gastos para minimizar su experiencia con el coronavirus", dice el artículo que escribieron Alex Williams y Jonah Engel Bromwich para The New York Times el 6 de marzo; a través de una investigación descubrieron qué servicios de lujo se están agotando por la expansión mundial del coronavirus, una enfermedad que no reconoce clases sociales, pero que eso sí hace una diferencia.
Estas son las acciones de los ricos y famosos contra el coronavirus
La actriz Gwyneth Paltrow compartió una fotografía en su cuenta de Instagram, el pasado 26 de febrero, en donde se le ve utilizando un cubrebocas color negro de la marca Airinum, el cual tiene cinco capas de filtración y un acabado suave en la parte que hace contacto con la piel, tiene un precio entre los mil 500 y dos mil pesos mexicanos y que se encuentra agotado en su página web.
Otra compañía británica llamada Cambridge Mask Co., fundada por Christopher Dobbing, aseguró a los autores del artículo que han visto crecer 20 o 30 veces las ventas de sus tapabocas que tienen capas del filtrado de partículas y carbono de grado militar, que tiene un precio de casi 600 pesos.
La empresa Judy de Simon Huck, amigo de Kim Kardashian West, también ha visto superada su producción de equipos de supervivencia que incluyen un botiquín de primeros auxilios, una bolsa para desechos biológicos, toallitas húmedas, desinfectante de manos, baterías, una linterna, entre otros artículos que rondan entre mil y tres mil pesos. "Abrimos hace 40 días y a las tres semanas tenemos una pandemia global", dijo Huck.
En cuanto a los vuelos privados, la compañía Southern Jet ubicada en Boca Raton, Florida, envió por correo a sus clientes un mensaje que decía: "Evite el coronavirus con vuelo privado… ¡Solicite una cotización hoy!", lo que generó criticas por tener poca sensibilidad, pero su director de ventas Eric Sánchez dijo que han aumentado sus solicitudes. Un vuelo de Florida a Nueva York en un avión mediano puede costar más de 400 mil pesos.
Por el lado de los que prefieren los yates, la presidenta de la compañía B&B Yacht Charter, Jennifer Saia, respondió que uno de sus clientes que había reservado una villa en Florencia, Italia, para el mes de abril, por el coronavirus lo cambió por un yate.ñ: "Tiene todo el sentido, mantienes a tu familia aislada en un ambiente muy pequeño que debería estar limpio".
Con la propagación de este virus, los millonarios han hecho uso de los servicios médicos de boutique como Sollis Health, que ofrece membresías familiares por 160 mil pesos al año en salas de urgencias VIP.
Una de las clientas de Sollis, quiso ir un paso más allá y se construyó una habitación en su casa con aislamiento médico, sistema de ventilación, sistema de presión negativa para restringir la circulación de patógenos, una cocina con hidratación intravenosa, medicinas, artículos de laboratorio, guantes, batas, mascarillas, oxígeno, comida, ropa de cama y trastes de todo tipo, algo así como un bunker.