Hasta las lágrimas, así se vivió la toma de protesta en Los Pinos

Algunas personas se sentaron frente a la televisión de sus casa para ver la toma de protesta de Andrés Manuel López Obrador como el nuevo presidente de México, pero un grupo de mexicanos decidieron hacerlo desde Los Pinos, la histórica residencia de los Mandatarios mexicanos en las últimas décadas.

Son cerca de las 10 de la mañana y sobre la calle de Molino del Rey, los jóvenes que acaban de recibir su cartilla militar caminan en el sentido opuesto de quienes van buscando la entrada a Los Pinos. “

Sigan caminando. Todo derecho”, dice un joven militar.

Es la primera ocasión en más de ocho décadas que los ciudadanos podrán cruzar estas puertas. La gente no sabe muy bien hacia donde caminar pero se deja llevar por la mayoría. Un portón verde que anteriormente estaría sellado y resguardado por elementos del ejercito, ahora está abierto. Una mujer explica que los que lleven bolsas y mochilas se coloquen en una fila del lado izquierdo, el resto a la derecha.

Los visitantes pasan sus pertenencias por una banda de rayos como las de losa propuestos y luego cruzan un detector de metales para recibir el “Bienvenidos” de la voz de un soldado. La caminata es cuesta arriba. Una fila aguarda su turno para poderse tomar una foto en el emblema que garantiza que se encuentran en Los Pinos donde otra vez la palabra Bienvenidos se hace presente, ahora en un letrero floral color blanco.

La Banda Sinfónica Tepozteca del sistema Soñemos del estado de Morelos interpreta algunas piezas musicales mientras la gente mira en una pantalla instalada en los jardines la transmisión en vivo de la toma de protesta del nuevo presidente de México Andrés Manuel López Obrador .

“¡Fuera Peña!” gritan cada que en la pantalla de leds aparece el hoy expresidente de México. Hay algunas banderas de México, algunas de Morena, el partido que llevó al tabasqueño a la presidencia y una de la República popular de China.

Los comentaristas de la transmisión reportan que se esta impidiendo el arribo del mandatario Venezolano, Nicolás Maduro al recinto de San Lázaro un conato de desacuerdo se vive entre los presentes, entre los que gritan:

“Maduro eres bienvenido” y los que mueven su mano en el aire para decir no. La euforia es mayor y la discordancia no trasciende.

Cuando desde las bocinas se escucha “el presidente de los Estados Unidos Mexicanos dirigirá un mensaje a la nación”, los presentes se deshacen en gritos y vítores, en aplausos y puños en alto. Hay alegría y euforia y sensación de triunfo y lagrimas en los ojos. Así se vivió la toma de protesta de Andrés Manuel desde los Pinos.