Ninguna lente ni ningún filtro serán capaces de capturar ni de resaltar la belleza de la misma manera en que los ojos la perciben en el paisaje semidesértico donde se encuentra Viatura Omūn, un glamping ubicado al interior de un viñedo a las afueras de San Miguel de Allende, que visitamos hace unos días y del que nos enamoramos.
Viatura Omūn: El glamping que debes vivir en San Miguel de Allende
Ubicado a las afueras de San Miguel de Allende, se encuentra Omūn, un glamping para disfrutar de la naturaleza, el confort y reconectar con uno mismo.
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Viatura Omūn: El glamping que necesitas conocer a unos minutos de San Miguel
Si tú también eres de las personas que aman los escenarios naturales, disfrutan las caminatas por terrenos pintorescos, los paseos a caballo y acampar para disfrutar del espectáculo inigualable de un atardecer rodeado por la naturaleza, pero no te gusta sacrificar el confort de una cama, un baño con agua caliente y un servicio de excelencia, entonces Viatura Omūn San Miguel de Allende es el destino ideal para ti.
La tranquilidad que se respira en el terreno de este glamping, así como sus instalaciones, la oferta gastronómica (¡los drinks!) y la variedad de experiencias que los anfitriones tienen preparadas para los huéspedes convierten tu estancia en la oportunidad perfecta para liberar los sentidos mientras conectas con la naturaleza y contigo mismo, lejos del ajetreo de la cotidianidad.
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Destino: Viatura Omūn San Miguel de Allende; así inició el viaje
Salimos la mañana del miércoles de la Ciudad de México con destino a La Venta, un pequeño poblado a las afueras de San Miguel de Allende para conocer Viatura Omūn, un resort bajo el concepto de glamping, conformado por tents procedentes de Sudáfrica de distintos tamaños y completamente equipadas, cuyas carpas en color verde olivo se mimetizan con la vegetación característica del clima semidesértico, en un terreno de 200 hectáreas en el que hay un viñedo, plantíos de lavanda y de árboles de olivos por los que –naturalmente– puedes (y deberías) caminar o recorrer en bici o a caballo.
Lo primero que pensamos al llegar es que concluimos una road movie después del trayecto desde la CDMX hasta este punto del estado de Guanajuato. Y que tras el viaje, que fue de lo más ameno debido a la buena plática con Juan José, nuestro conductor, estamos listos para protagonizar un western o una historia veraniega.
Al sentir el calor y los rayos del Sol sobre la piel, nuestra vista comienza a asimilar la amplitud del lugar y el diseño simbiótico (por llamarlo de alguna forma) de las instalaciones y de las tents, donde predominan los muros de piedra levantados artesanalmente, los caminos empedrados y muchos detalles en madera que conviven en armonía con los huizaches, cactáceas, espinos y demás plantas típicas de la región.
Tenemos frente a nosotros dos días y medio llenos de actividades entre dinámicas y relajantes que, desde un inicio, nos hacen pensar que tendremos una estancia placentera. Sin embargo, esa primera idea va enriqueciéndose al descubrir nuevos detalles del lugar y ser recibido con la calidez del staff que, en todo momento, se encarga de hacernos sentir de maravilla.
Glamping en Viatura Omūn San Miguel de Allende
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Raymundo Zamarripa / QUIÉN
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Raymundo Zamarripa / QUIÉN
No diría que me sentí "como en casa" porque sólo en un sitio como éste llegas a tu habitación en un carrito de golf y, cuando cae la noche, te arrullan los sonidos de los grillos y otros insectos (que no invaden las tents) y puedes escuchar –a cierta distancia– las “risas” de los coyotes que, advertidos de la presencia de los humanos, prefieren esperar la oscuridad para hacer sus recorridos sin cruzarse con nadie.
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Los planes para disfrutar del glamping en Viatura Omūn
¿Cuál es tu plan ideal cuando tomas unos días para refugiarte en un lugar como Viatura Omūn, donde las preocupaciones quedan atrás y sólo queda dejarse abrazar por el encanto de la naturaleza y una atención de primera?
¿Salir a caminar o a correr al amanecer en un terreno en el que prácticamente estás solo? ¿Qué tal recorrerlo en bici? ¿Tomar el desayuno en tu tent, en tu terraza o, mejor aún, en una charola flotante mientras disfrutas de tu jacuzzi privado? ¿Te agrada la idea de refrescarte en la alberca y pedir un coctel para dejar que tu mirada se pierda en el horizonte? ¿Te gustaría comer unos deliciosos tacos rancheros y hacer tú mismo las tortillas, un queso y las salsas para armarlos?
¿Qué te parecería comer un delicioso asado organizado por el chef y su equipo y tomar una cerveza bien fría en una mesa dispuesta en medio del viñedo, para rematar con una deliciosa taza de café? ¿Y si mejor participas en una cata de vinos y degustas un maridaje con bites preparados al momento? ¿O le dirías que no a un paseo a caballo para sentirte un poquito más inmerso en ese western que comenzaste a imaginar a tu llegada? ¿A lo mejor se te antoja ver una película antes de ir a dormir u observar las estrellas con un telescopio?
Todos estos planes están disponibles en Viatura Omūn… ¡y los hicimos todos! De esta forma vivimos la experiencia a plenitud y podemos decir que la viviríamos de nuevo y sin dudarlo.
Actividades en Viatura Omūn
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Glamping: para disfrutar de la naturaleza sin sacrificar el lujo y el confort
Con el concepto de glamping, la idea de acampar ha cobrado un sentido glamoroso (de ahí el término) sin que la posibilidad de gozar del lujo de un hotel de gran turismo haga que se pierda la esencia de estar en contacto con los elementos de la naturaleza y maravillarnos con el amanecer, el vuelo de un águila o el perfil de un barranco tallado por el paso del tiempo, como es posible hacerlo en esta propiedad.
Antes de concluir nuestra estancia en Viatura Omūn, hicimos un hiking matutino por una de las rutas que recorren el terreno. Nada más vigorizante que caminar por la loma, observar la vegetación y apreciar el paisaje mientras charlamos con Paco, el director del lugar, quien nos platica de los planes que tienen para ampliar este proyecto en el corto y mediano plazos.
Están por concluir la construcción de un spa de dos mil quinientos metros cuadrados con instalaciones como gimnasio, cabinas de tratamientos, espejo de agua y otras zonas húmedas, entre las que se encontrará una alberca de arcilla. Además, de la edificación de su propia vinícola, crearán más espacios para hospedaje y un desarrollo inmobiliario para quien desee tener una propiedad en este cautivador paisaje.
Después de nuestra caminata, un brunch nos espera sobre una mesa que observa hacia el barranco y, tras un último recorrido por la propiedad y cuando ya comienzan a calar los rayos del sol, nada mejor para concluir la experiencia que una inmersión en agua helada (previa meditación para preparar el cuerpo y la mente) y un masaje que nos ayuda a reiniciarnos por completo antes de tomar camino y volver la Ciudad de México… con la idea de que tenemos que regresar.
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