Kioto, en Japón, es el destino perfecto para pasar un fin de año memorable, ya que aquí encontrarás el famoso santuario Fushimi Inari-Taisha. Este recinto recibe a millones de visitantes para celebrar Hatsumode, una costumbre sintoísta que consiste en hacer el primer rezo del año que comienza.
Usualmente, las personas también asisten al santuario en Nochevieja para escuchar las campanadas y dar la bienvenida al Año Nuevo. La festividad se alarga hasta las primeras dos semanas de enero, momento en el que se acude a los diferentes santuarios del país para rezar, realizar ceremonias, pedir deseos y obtener la protección de los dioses, como lo hacen los japoneses sintoístas y budistas.
Además, durante Hatsumode se llevan a cabo otras tradiciones llenas de misticismo: los omikuji, papeletas de la fortuna que te dirán la suerte que te depara el nuevo año, y los omamori, amuletos de la suerte que se compran tras quemar los del año anterior en grandes hogueras. Incluso se acostumbra probar un poco de toso, un sake especial que se bebe únicamente en Año Nuevo.
Entre el 1 y 3 de enero de cada año, casi tres millones de visitantes acuden al santuario Fushimi Inari-Taisha.