Fue el pasado mes de septiembre cuando Rihanna rompió Instagram con una publicación: su mano sostenía un balón con el logo de la NFL, anunciando así que sería ella quien se presentaría en el medio tiempo del Super Bowl en febrero de este año, una sorpresa para todos, pues anteriormente la cantante ya había dejado claro el porqué no se presentaría en uno de los eventos más vistos a nivel mundial.
La fecha llegó y Rihanna no solo sorprendió por su performance y set list, sino también por la gran revelación que hizo sobre las plataformas suspendidas en el aire: la barbadense anunciaba su segundo embarazo mientras se frotaba su baby bump . Además de su regreso y el anuncio que era un gran secreto, Riri sorprendió con su look, el cual parece haber recreado ayer por la noche en una cena con su novio en Nueva York.