Los uniformes que se solían utilizar los estudiantes de las universidades más prestigiosas de Estados Unidos e Inglaterra fueron fuente de inspiración para darle paso a uno de los estilos que más nos gustan: Preppy.
Sin duda la estética colegial es la esencia de este estilo, aquí los sacos grandes con escudos, chalecos con rombos y faldas plisadas son algunas de las piezas más características.
Su boom se dio a principios de 1900 y tiempo más tarde Tommy Hilfiger se encargó de darle gran impulso, y aunque de alguna u otra forma siempre hay algo de esto en sus colecciones, esta vez la trae completamente de vuelta en una colección inédita en la que se conjunta la herencia de este estilo y el contemporáneo, creando el Modern Prep.