Pierpaolo Piccioli vuelve a darle un toque sutil de volumen a las prendas ya sea en mangas, faldas y hombros. La camisa blanca, el básico que todas tenemos en el clóset, se reinventa en varios modelos.
Los vestidos en forma de campana, los pómulos y labios exagerados de las modelos de Balenciaga fueron los aspectos que siguen dando de qué hablar.
Valentino por Pierpaolo es un deleite para los ojos, introduce el color neon en una paleta de colores de manera magistral sin quitarle protagonismo a los demás looks.
Transparencias, plumas y el estampado selvático son los elementos que destacan en la colección.
La reinvención de la camisa blanca para el verano, es otro de los aciertos del desfile. En vestidos con plumas y de estilo camisero, con mangas bombachas, y en su forma más sencilla.
Por último y no menos importante, Krini, la modelo mexicana modelo con el look número 25, un vestido de corte recto con mangas largas, una silueta muy Pierpaolo, con estampado de flores.
Demna Gvasalia sentó a todos en una especie de anfiteatro cubierto por una espectacular alfombra azul rey.
Los vestidos en forma de campana captaron la atención de los espectadores, azules, plateados y dorados, algunos con un gran moño en la espalda. Los hombros pronunciados con aires ochenteros formaron parte de la propuesta de Balenciaga.
Por otro lado, Demna quiere que la gente godín se sienta en un desfile de modas con los trajes de hombre, lo que pareciera uniformes de oficina con gafettes incluidos, parece ser ahora lo más chic.
