"Profundo respeto"
Al disculparse, las tres marcas aseguraron que habían retirado de la venta los modelos incriminados.
"La casa Givenchy presenta excusas sinceras por este error, que no refleja su profundo respeto por el público chino", aseguró la marca francesa en un comunicado.
"Amamos a China y respetamos resueltamente su soberanía territorial nacional", dijo Versace el domingo en su cuenta de Weibo, donde fue blanco de críticas. Coach dijo que reconoce "la gravedad de este error" y lo lamenta "profundamente".
Pero este incidente dejó a los grandes nombres de la moda sin sus "embajadores" en el mercado chino.
La actriz Yang Mi anunció que terminaba su colaboración con Versace, señalando que el grupo italiano era "sospechoso de atentar contra la soberanía nacional de nuestro país".
Por su parte, la modelo Liu Wen tomó una decisión similar respecto a Coach, explicando en su cuenta de Weibo que "¡la soberanía nacional y la integridad territorial de China son en todo momento sagradas e inviolables!". "Me gusta mi patria y defiendo decididamente la soberanía nacional de China", escribió.
Por último, el cantante Jackson Yee, del grupo masculino TFBoys, quemó puentes con Givenchy.
Anteriormente, otros sectores, como el de la aviación, la hotelería o el del automóvil, ya se vieron implicados en polémicas a causa del fervor nacionalista de China.
En una muestra de la influencia de la segunda economía del mundo, las aerolíneas mundiales obedecieron el año pasado a un ultimátum de Pekín y dejaron de presentar a Taiwán en sus portales como un país independiente. Todo el que busque un vuelo para Taipéi debe hacerlo en la rúbrica "China".
Antes de eso, Mercedes tuvo que disculparse por haberse atrevido a utilizar una cita del dalái lama en uno de sus anuncios publicitarios. El líder espiritual tibetano es una de las bestias negras del régimen comunista, que le acusa de reclamar la independencia del "techo del mundo".
"Somos conscientes de haber herido los sentimientos del pueblo" chino, tuvo que declarar el fabricante alemán, que tiene su primer mercado mundial en China.