La marca de jabones que pretende salvar al mundo
Dr. Bronner’s Magic Soaps llegó a México, y tuvimos la fortuna de hablar con Mike Bronner, presidente de la compañía. Además de hablar sobre lo que hace a Dr. Bronner’s una marca única y especial, Mike nos contó de su herencia familiar, cómo empezaron a hacerse sus jabones, lo difícil que fue y nos hizo darnos cuenta, que hoy más que nunca, es importante mantenernos unidos para así salvar al mundo.
¿Quién es Mike Bronner? Michael Bronner es el Presidente de Dr. Bronner’s Magic Soaps. Es el nieto del fundador de la compañía, Emanuel Bronner, y forma parte de la quinta generación de jaboneros. Mike se unió a la compañía en el 2000, después de viajar por el mundo, ser maestro de inglés en Japón y estudiar en Etiopía.
El Holocausto en Alemania “Mi familia empezó a hacer jabones en 1858 en Alemania. Teníamos un par de fábricas allá. El abuelo de mi abuelo era químico y fabricante de jabones y así empieza la historia de Dr. Bronner’s. De hecho, Bronner’s viene de Heilbronn, que era el lugar de Alemania donde vivía mi familia. Más adelante, se le quitó el Heil, por razones obvias relacionadas con Hitler… Mi abuelo (Emanuel Bronner) tuvo suerte. Logró salir de Alemania antes de que las cosas se pusieran feas. Como sabes, la gente no quería a los judíos en ese entonces. Así que mi abuelo salió, pero sus papás se quedaron en Alemania. Una vez que llegó a Estados Unidos, trató de convencer a sus papás de salir, diciéndoles que era ahora o nunca, que las cosas no iban a mejorar. La respuesta de ellos fue ‘no’. Pensaban que Hitler iba a ser olvidado y decidieron quedarse. Lo peor de los Nazis no fue lo que hicieron de manera ilegal. Obviamente todo fue horrible pero, según ellos, nada era ilegal. Era legal matar judíos, era legal meterlos en campos de concentración, era legal quitarles todo.”
Quién: Entonces, ¿tuvieron problemas con las fábricas en Alemania durante la Segunda Guerra Mundial? Mike Bronner: ¡Sí! Definitivamente. No le quitaron las fábricas a mi familia; se las compraron. Los Nazis les pagaron lo equivalente a 1 dólar por las fábricas. Le hicieron lo mismo a muchos judíos. Tenemos una carta de la persona que compró las fábricas, que envió a todos nuestros clientes. Una carta muy casual. Una carta como la que solíamos mandar cuando algo en las fábricas cambiaba y avisábamos a los clientes. La carta dice: A todos los clientes: Les alegrará saber que las fábricas tienen nuevos dueños. Pueden seguir confiando en los excelentes niveles de servicio al cliente y buena calidad que siempre han recibido en el pasado. ¡Heil Hitler! Básicamente nos quitaron la fábrica. Aires nuevos “Más adelante, cuando mi abuelo ya estaba en Estados Unidos, recibió una carta que venía desde uno de los campos de concentración. La habían mandado sus padres y estaba prácticamente tachada. Lo único legible era: “Tenías razón.” Mi abuelo no volvió a saber de ellos (sus padres). En ese entonces mi abuelo estaba en Chicago. Era realmente pobre, pero había tomado la decisión de salir de Alemania, alejarse de los Nazis, y se dio a la tarea de hacerse de un nombre. Se convirtió en un asesor my exitoso. Desarrolló patentes y sabía muchísimo de jabones y de química gracias a su pasado en las fábricas en Alemania. Cuando escuchó que sus padres habían muerto en el Holocausto, decidió salvar al mundo, unir al mundo. Esa sería su misión.” "Mi abuelo era un visionario y quería salvar al mundo, quería unir al mundo."
Salvando al mundo Q: ¿De aquí viene la misión de Dr. Bronner’s? MB: Exacto. La gente pensaba que mi abuelo estaba loco. Hablaba de unir a los cristianos, musulmanes, hindus, judíos y budistas. Hablaba de que creemos en el mismo Dios, de que entendiéramos nuestras diferencias y lo similares que somos. Decía que dejáramos atrás los problemas o, algún día, el Holocausto podría volver a pasar. En ese entonces, con todo lo que había pasado, lo llamaron loco y lo internaron en un hospital psiquiátrico donde le dieron terapia de shock. Era lo que se usaba en ese entonces. Se escapó del hospital varias veces hasta que huyó a Los Ángeles, California. Ahí es donde decidió hablar de su filosofía en público. Se ponía frente a la gente y venían a escucharlo. Mi abuelo regalaba jabones sin marca a todos los que lo escuchaban, y el jabón se hizo muy popular. La gente empezó a ir sólo por el jabón en vez de a escucharlo. Entonces decidió poner su filosofía en las botellas de jabón. De esa manera, cuando la gente se tomara un baño, podría leer su filosofía. Así empezó Dr. Bronner’s. Q: ¿Su lema ALL-ONE (TODOS-UNO) viene de la filosofía de la que hablaba tu abuelo? MB: Sí. Las palabras ALL-ONE pueden ser densas al verlas en la botella. Mucha gente nos pregunta qué significa. ALL-ONE significa muchísimas cosas. Es un conjunto de palabras muy poderosas. Creo que hoy en día este mensaje es igual, o más importante de lo que alguna vez fue. Hay tantas cosas que nos dividen como sociedad. Mi tío solía decir: “para poder amar a una persona, debes conocer a una persona”, y creo que ALL-ONE es entender y reconocer nuestra humanidad y que todos somos iguales. Las cosas que nos dividen son las cosas que desconocemos o que no entendemos como sociedad. Es importante entender que lo que nos une es mucho más grande que aquello que nos divide. Tenemos también una estampa que dice ‘coexist’, con símbolos que representan todo tipo de cosas, desde el símbolo de paz, hasta símbolos para representar a cada una de las religiones.
Jabones diferentes “Nuestra manera de hacer jabones es esencialmente la manera en la que se hacían hace 3,000 años. Es un proceso sencillo, y uno de los procesos más antiguos que existen.” Q: ¿Qué diferencía a Dr. Bronner’s de otras compañías en cuanto a cómo se producen los jabones? MB: La química de nuestros jabones es básicamente aceites: aceite de coco, aceite de oliva, aceite de jojoba, aceite de cáñamo, que reaccionan con álcali para hacer jabón. Nuestro proceso es diferente a otros pues tenemos una técnica en la que para hacer un jabón líquido muy concentrado, necesitamos que nuestro jabón líquido sea 39% sólido y 61% líquido. Otras marcas con jabones líquidos, hacen su producto con un 11% sólido y luego le agregan espesor. Una de las razones por las que nuestro jabón funciona tan bien es que no agregamos espesor. Además, todos los ingredientes son de alta calidad y orgánicos. Encima de todo, nuestros productos son 100% biodegradables. Q: Hablando de ingredientes orgánicos, ¿cuándo empezó Dr. Bronner’s a ser aprobado orgánicamente y eco-friendly? MB: A finales de los años 20, mi abuelo empezó a hacer jabones en Estados Unidos. En ese entonces, lo nuevo y lo moderno era alterar absolutamente todo en los laboratorios. En una frase: vivir mejor a través de la química. Todas las cosas naturales que conocemos, se “mejoraban” en los laboratorios. De esta manera empezaron los colores artificiales, los sabores artificiales, los detergentes artificiales, leche en fórmula para bebés, el plástico, etc. Mi abuelo iba en contra de todo esto diciendo que todo lo artificial que se estaba haciendo tardaría años en deshacerse. No fue hasta los años 60 que los jabones de mi abuelo tuvieron su boom. La gente empezó a pensar en la importancia de la Tierra y de cuidarla, tal como decía mi abuelo. Sus jabones eran (y siguen siendo) hechos con ingredientes naturales, con aceites de plantas y vegetales. Nada viene de los animales ni petroquímicos. Fue en el 2003 cuando nos certificamos con productos orgánicos. No cambiamos nuestra fórmula, pero siempre tratamos de hacer cambios en los ingredientes: que no sean ingredientes OGM (Organismos Genéticamente Modificados), y que siempre sean orgánicos. Es llevar la visión de mi abuelo tan lejos como podamos. Un paso más… Q: Pensando en la visión de tu abuelo, ¿qué se siente expandirse por el mundo y ahora estar en México? MB: En general me encanta que estemos en otros países. No es solamente mi punto de vista personal, pero me siento un ciudadano del mundo, y todos lo somos. Además, ¡la gente siempre va a necesitar jabón! Pensamos (como sociedad) que el jabón es un producto ordinario, pero nosotros lo hacemos extraordinario. Culturalmente me encantaría que los jabones regresaran a Alemania, por el significado sentimental que representa para mi familia. También me encantaría llegar a Israel, pues mi herencia es judía. Pero México ocupa un lugar especial en nuestro corazón. Tenemos muchísimos trabajadores mexicanos, y me refiero a que ocupan puestos importantes en la compañía. Dr. Bronner’s está en San Diego, estamos a 25 minutos de la frontera mexicana. Ver nuestros productos con etiquetas en español es increíble. Esperamos ser igual de exitosos en México como lo hemos sido en Japón, en Inglaterra, en Corea, en Estados Unidos. Los mexicanos han contribuido mucho a Dr. Bronner’s, y es un proyecto que nos da mucha emoción.
Dr. Bronner’s, los jabones que van a salvar al mundo “Con nuestros productos, no sólo compras un buen jabón, pero hay todo un mundo detrás de lo que se compra. Cuando compras Dr. Bronner’s tu dinero se va al mundo para que podamos ayudar a otras personas a hacer sus vidas y a salir adelante. Somos amigos de los agricultores que trabajan para nosotros cultivando los ingredientes naturales. Les pagamos extra, les ayudamos a construir hospitales y casas. El 60% de nuestras ganancias del año pasado las donamos a causas caritativas. Constantemente tratamos de hacer lo mejor para la gente que trabaja para nosotros y para el mundo. Siempre nos preguntamos, ¿qué más podemos hacer para ayudar? Aprendimos gracias a mi abuelo que sí está bien querer ganar dinero y tener una buena vida, siempre y cuando des algo a cambio.” “Tenemos un juramento que siempre decimos y que está en cada una de nuestras botellas: En todo lo que hagamos, seamos generosos, justos y amemos a la Madre Tierra y sus habitantes. ¡Todos somos uno o ninguno! ¡Todos uno!”
Visita drbronner.mx para conocer más a detalle la marca, sus productos y dónde comprarlos.