La guapa hijastra de Al Pacino que ya reclutó Victoria´s Secret
Camila Morrone, hija de la actriz Lucila Polak (quien mantiene un noviazgo desde hace más de ocho años con el reconocido Al Pacino), ha sido elegida por la marca de lencería Victoria's Secret para formar parte de su próxima campaña. La joven de 17 años posee gran belleza y estilo, herencia de su madre. Su cuerpo tiene curvas sexys que no siempre han sido puntos a favor a la hora de tocar puertas en las agencias de modelaje: "Usé brackets toda mi adolescencia. Me la pasé esperando el día que me los quitaran para poder ir a una agencia. A los 15 años me explotaron las bubis. Todos me preguntan si me las operé, pero la verdad es que no estoy interesada en hacerme una cirugía plástica. Tengo trasero y para mí está perfecto. Cuando en una agencia me piden que la baje, yo le contesto: 'It's my ass' (es mi trasero)", narró a la revista Gente.
El secreto de su figura está más en el ejercicio que en la alimentación: "La lechuga no me va, ¡prefiero las pastas! Me gusta el Choripán, las milanesas y el lomo con papas fritas. Eso sí, hago yoga, pilates, salto a caballo y ando en bicicleta".
Además de gran atractivo, Camila posee gran actitud ante la vida: "Tengo sangre argentina y soy muy pasional", fue como se describió la joven que este mes termina high school en Bevery Hills.
Pese a ser cercana a una de las grandes estrellas de Hollywood, Camila quiere labrar su propio camino también en la actuación: "Ahora estoy por empezar el rodaje de una película independiente; aún no está definido mi papel. El cine es parte de mi vida, porque conozco a 'Al' desde los 8 años y para mí es una figura fuerte. Pero no le pido consejos: hay cosas que necesito descubrir sola".
Al respecto de tener hijos a una corta edad como ocurrió en el caso de su mamá, la joven parece tener claras sus pretensiones: "No me veo con un bebé a los 20 como mi mamá. Quiero tener hijos joven y soy muy maternal, pero es loco pensar que, con apenas unos años más que yo, ella ya daba vueltas por el mundo conmigo. Para mí fue una gran suerte, porque somos muy amigas, como hermanas. Casi como la misma persona en dos cuerpos, aunque a ella le toque hacer de madre y poner límites".
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