Creatividad y diseño en la tercera noche de MBFW México
Mercedes-Benz Fashion Week México está en su apogeo y la noche de ayer estuvo cargada de una gran variedad de propuestas que prueban que al diseño mexicano lo caracteriza la originalidad. Macario Jiménez , Ángel Sánchez , Pink Magnolia , Lydia Lavín , JI+B y Black by Mauricio Olvera y Leonardo de Lozanne definieron la dirección que tomarán para la siguiente temporada Primavera/Verano 2014.
La creatividad fue la clave en todas las colecciones. Por ello, no hubo una similitud en una y otra pasarela, más alla del gusto por lo femenino desde todas sus perspectivas: lo dulce, lo elegante, lo sofisticado, lo atrevido y lo minimalista. Por ejemplo, Jesús Ibarra y Bertholdo Espinoza presentaron su más reciente colección, compuesta por femeninos diseños con un toque atrevido, proporcionado por materiales como gasas, encajes y sedas. Por otra parte, Black mostró una vez más la habilidad para lograr una colección "wearable" para los hombres que buscan en la ropa algo más que comodidad: que ven en la moda la posibilidad de expresarse por medio de ella.
Macario Jiménez abrió la tercera jornada con la presentación de su colección en The Box, la alternativa del Mercedes-Benz Fashion Week México a la tradicional pasarela. Ésta permite al público mirar de cerca los diseños sin necesidad de estar en primera fila y obvservarlos desde distintos puntos de vista, mientras el diseñador pone el toque final a sus creaciones conduciendo a las modelos para que muestren lo mejor de cada atuendo.
Así fue como pudimos ver de cerca el detalle que pone el diseñador mexicano a sus creaciones, caminando por dos senderos, el de los más femeninos y rebuscados y el de lo liviano y minimalista. Por un lado, vestidos con aplicaciones rojas, flores, drapeados y ondas ligeras y por otro, escotes profundos y líneas rectas.
Fiel a su origen como arquitecto, Ángel Sánchez se apegó a los cortes estructurados, dejando que la figura femenina sea quien de volumen a los diseños. Así con una feminidad sutil pero muy poderosa, los diseños del venezolano consiguieron el aplauso del públicoque se dio cita en Campo Marte.
En contraste, Pink Magnolia con ya cuatro años en el mercado mostró una opción dulce y muy girly. Las rayas fueron sus mejores aliadas, las cuales aprovecharon para crear distintos vestidos, faldas y demás prendas, además de vestidos con aire retro con detalles como peplums, ondas, drapeados. Suéteres tejidos con diseños de algodón de azúcar o motas de colores -a la altura de las costillas, poniendo un toque atrevido al look- hasta faldas en corte A, jumpsuits y botones en forma de corazón... Pink Magnolia propuso una primavera muy sweet.
Cambiando por completo de panorama, la colección de Lydia Lavín "Hijas de la lluvia" nos llevó por un camino muy distinto. Con el trabajo de artesanos bordadores de cuatro comunidades náhuatl-parlantes, las cenefas y bordades simbólicos de flora y fauna pusieron el toque colorido y único a cada pieza.
Zapatos con detalles en yute y mechones de colores, vestidos con transparencias, trajes de baño con originales bordados, esos fueron algunos de los puntos más llamativos. La diseñadora cerró con un look bridal para hombre y mujer. Para ella, un vestido con cenefas transparentes, para el, guayabera de lino blanco y pantalones crema. El cierre fue de lo más memorable: algunos de los artesanos involucrados en el proyecto fueron invitados por la diseñadora a la pasarela donde fueron ovacionados por varios minutos.