Los juegos ópticos de Carolina Herrera
La elegancia y sofisticación en cada uno de los diseños de Carolina Herrera han convertido a sus desfiles en unos de los más importantes, cotizados y esperados durante la Semana de la Moda neoyorquina.
Esta temporada no fue la excepción con una gran convocatoria que incluyó a reconocidos editores de moda, actrices y modelos. Así, minutos antes de las 10 de la mañana la expectativa aumentaba a la par que Molly Sims, Dita Von Teese, Uma Thurman, Anna Wintour, Hamish Bowles, Bill Cunningham, Christina Hendricks y Christina Ricci tomaban sus lugares en la primera fila del evento.
La venezolana, de 74 años, decidió retomar sus raíces e inspirarse en el arte plástico de sus compatriotas, Carlos Cruz Diez y Jesús Rafael Soto, quienes sobresalen por impulsar el movimiento artístico cinético y sus juegos ópticos a través de sus obras.
Las luces se encendían y la impactante Karlie Kloss abría la pasarela con un conjunto que incluyó una falda vaporosa en negro acompañada por una pulida camisa blanca. Le siguió Lindsay Wixson que abrió paso a un abanico de siluetas de tipo fluido que se confeccionaron en exquisitos tejidos vaporosos. Entre los que figuraron organza, seda, gasas y muselina.
Con una cromática que incluyó tonos ocres, verdes y cafés, Herrera supo traducir las líneas artísticas de Cruz y Soto en motivos gráficos de líneas que se expresaron a manera de ilusión óptica gracias a la sobreposición de las telas.
“Cuando creas diferentes capas con distintas texturas, esto se convierte en una entera experiencia visual”, declaró la diseñadora al terminar su desfile.
Destacaron la serie de vestidos largos, trapecios y faldas que proponían una figura delicada, suave y suelta, misma que marcó de manera sútil, la cintura femenina.
Complementos como las pamelas y trajes de baño se sumaron a la propuesta primaveral ideal para las amantes de lo femenino.
Como ya es costumbre la afamada diseñadora salió a saludar al público ataviada con su ya clásica camisa blanca a juego con perlas y falda negra.