Los tratamientos de belleza de los famosos antes de los Oscar
Las estrellas de Hollywood que quieren lucir lo mejor posible en la noche más grande del año reciben tratamientos de belleza que van desde un lujoso y alocado esmalte negro con diamantes para uñas por 250 mil dólares a tratamientos faciales a base de excrementos de pájaro.
Los premios de la Academia que se entregarán el 24 de febrero son casi tan importantes en cuanto a moda como en lo que respecta a las películas, dado que la retransmisión por televisión de las llegadas a la alfombra roja y a la ceremonia alcanzan una audiencia estimada de mil millones de personas en todo el mundo.
Es una noche en la que mujeres -y hombres- no escatiman en gastos para deslumbrar a los asistentes a los Oscar, poniendo fin a una carrera de dos meses que recompensa a las grandes estrellas y películas del año anterior.
"Es la gran final de la temporada de entrega de premios así que los famosos hacen todo lo posible cuando se trata de moda y belleza", dijo el experto estilista Sam Saboura, presentador de moda en el canal por cable TLC.
"Están dispuestos a lo que sea para perfeccionar su imagen y causar sensación en la alfombra roja", sostuvo. En el pasado, la siempre joven actriz Demi Moore, de 50 años, ha admitido haberse puesto sanguijuelas en la piel para desintoxicar su sangre. Gwyneth Paltrow llegó en una ocasión a un estreno con la espalda cubierta de cardenales circulares de "cupping", una especie de acupuntura que se dice estimulaba el flujo de la sangre y aliviaba el estrés. Angelina Jolie dijo a Vanity Fair en 2011 que sus hijos Maddox y Pax se hacían pedicuras en las que "los peces comían la piel muerta de sus pies", mientras el empresario musical Simon Cowell informó que llevaba dosis de oxígeno inhalable en el bolsillo para mantener su aspecto. Este año, hay un giro en el uso de rellenos dérmicos inyectables para suavizar las arrugas faciales y rejuvenecer la piel. Se ha introducido el Vampire FaceLift, que mezcla el relleno con la propia sangre del paciente.
SANGRE Y EXCREMENTOS DE PÁJARO
El cirujano plástico Paul Nassif, quien ofrece el servicio en su clínica de Beverly Hills, dice que el proceso implica la extracción de un tubo de sangre del paciente, aislar ciertos componentes y después mezclarlos con un relleno dérmico e inyectarlo de nuevo en la piel. "Es un golpe doble", dijo Nassif a Reuters. "Se obtiene una respuesta inmediata por parte del relleno y los beneficios a largo plazo son la formación de nuevo colágeno, volumen natural y una piel más sana". Para aquellos que son reacios a las agujas, los excrementos de aves podrían ser la respuesta para una piel más luminosa. El Shizuka New York Day Spa de Manhattan ofrece un Geisha Facial, un tratamiento de una hora de duración que consiste en aplicar excrementos de ruiseñor en forma de polvo para la piel. Los excrementos, que la propietaria del salón de belleza Shizuka Bernstein importa de Japón, contienen enzimas naturales que exfolian la piel. "Hay muchas opciones drásticas para exfoliar la piel como productos químicos y la microdermabrasión", dijo Bernstein a Reuters. "Pero si quieres un tratamiento más natural, éste te dará grandes resultados. Se retira la piel muerta, el tono de piel es más brillante y sales con un look radiante", dijo. Cuando se trata del pelo, The Broot en Santa Mónica aplica un tratamiento para cabello totalmente natural que tiene un ingrediente secreto: testículos de toro.
Su propietaria Samira Asemanfar dijo que las familias persas los habían utilizado durante generaciones, cociendo testículos comprados en una carnicería local para extraer un caldo de proteínas y hormonas que se añade a los tratamientos para fortalecer y reparar el cabello. "Los clientes nos han dicho que sentían el pelo más grueso, más reparado, más fortificado. Una clienta dijo que le crecía más rápido el pelo", aseguró Asemanfar.