Los vestidos icónicos de Gianni Versace

Extravagantes camisas de seda, medusas, motivos de cadenas de oro y vestidos que enfatizaban la silueta femenina reinaron durante la década de los 90, época de oro para el diseñador Gianni Versace cuyos diseños fueron sinónimo de opulencia y lujo.

El creativo italiano, quien hoy celebraría 65 años, formó un imperio valuado en 500 millones de euros y que hoy continúa al mando de su hermana y musa Donatella Versace.

El desaparecido talento revolucionó la industria no sólo con sus diseños sino con la diversificación de sus productos que abarcan desde vajillas hasta hoteles, pasando por muebles y sábanas. Además fue uno de los pioneros en apoyar con grandes sueldos a modelos como Naomi Campbell y Cindy Crawford contribuyendo al fenómeno de las `top models´.

Sus extravagantes atuendos marcaban la diferencia en la alfombra roja, razón que lo posicionó como el favorito de las celebridades, modelos y `royals´, con quienes frecuentemente establecía una estrecha amistad. Tal fue el caso de Lady Di, quien acudía a él para pedirle consejos de estilo y lo convirtió en uno de sus confidentes.

Para sus aparaciones públicas la princesa no titubeaba en usar creaciones de la firma confeccionadas especialmente para ella y de acuerdo a sus atributos. Así, éstos enfatizaban el color de sus ojos, su piel y su silueta, derrochando aires de elegancia. En una atmosfera donde Diana buscaba sobresalir, Gianni fue pieza clave para convertirla en un ícono de estilo.

Sus piezas no sólo impulsaron la figura pública de Diana sino la de otras famosas como Cindy Crawford, Elizabeth Hurley y Jennifer Lopez.

Nadie olvidará a la supermodelo llegar de la mano de Richard Gere a los Oscar en 1991, luciendo un vestido corte sirena tipo halter con escote profundo en un despampanante color rojo. De igual manera los tabloides de 1994 fueron protagonizados por el atuendo con broches de oro `oversized´ de Elizabeth Hurley, quien asistió con Hugh Grant a la premier de `Cuatro bodas y un funeral´.

Prosiguiendo con su obra, Donatella hizo una gran labor al crear el tan afamado vestido de seda con motivos selváticos de Jennifer Lopez para los Grammys en 2000.