Hoy serás testigo de una aventura culinaria que transformará tu cocina en un espacio de aromas irresistibles y te llenará de una satisfacción tan dulce como la canela y el glaseado. Prepárense, porque no hay nada como unos rollos de canela caseros para alegrar el día.
Prepara tus propios cinnamon rolls en 4 pasos
Todos amamos un antojito dulce o postre, y qué mejor que esta joya que solo con olerlo caerás redondito en la tentación.
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Ingredientes para hacer rollos de canela en casa
Comencemos con los ingredientes. La magia de los cinnamon rolls radica en su simplicidad, así que no necesitamos nada exótico, solo:
- Para la masa:
- 4 tazas de harina
- 1 paquete de levadura seca
- 1 taza de leche tibia
- 1/2 taza de azúcar
- 1/3 taza de mantequilla derretida
- 1 huevo
- 1 pizca de sal
- Para el relleno:
- 1 taza de azúcar morena
- 2 1/2 cucharadas de canela
- 1/3 taza de mantequilla a temperatura ambiente
- Para el glaseado:
- 1 taza de azúcar glas
- 2 cucharadas de mantequilla derretida
- 1 cucharadita de extracto de vainilla
- 2-3 cucharadas de leche
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Cómo hacer rollos de canela
Paso 1: La magia de la masa
En un recipiente grande, mezcla la leche tibia con la levadura y deja que repose unos minutos hasta que veas burbujas. Esto significa que la levadura está viva y lista para trabajar, añade el azúcar, la mantequilla derretida, el huevo y una pizca de sal. Luego, poco a poco, incorpora la harina. Amasa hasta obtener una masa suave y elástica.
Coloca la masa en un recipiente engrasado, cubre con un paño limpio y deja que repose en un lugar calientito durante aproximadamente una hora. Aquí es donde la levadura hace su magia, y la masa duplicará su tamaño.
Paso 2: El relleno tentador
Una vez que la masa ha crecido, estirala sobre una superficie ligeramente enharinada hasta formar un rectángulo. Aquí es donde entra el relleno celestial. Mezcla el azúcar morena con la canela, y con la mantequilla a temperatura ambiente, extiende esta mezcla sobre la masa. Este paso puede ser un poco desordenado, pero, ¿qué es la cocina sin un poco de caos?
Luego, enrolla la masa desde el extremo más largo, formando un tronco apretado. Con un cuchillo afilado o hilo dental (sí, leíste bien, ¡hilo dental!), corta el tronco en rodajas uniformes.
Paso 3: Al horno
Coloca las rodajas en una bandeja para hornear engrasada, dejando un poco de espacio entre cada una para que puedan expandirse. Cubre nuevamente con un paño limpio y deja reposar durante 30 minutos más. Durante este tiempo, precalienta el horno a 180°C o 350°F.
Una vez que los rollos han crecido un poco más, hornéalos durante 20-25 minutos, o hasta que estén dorados y el aroma de la canela y el azúcar caramelizado llene tu cocina.
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Paso 4: El toque final
Mientras los rollos de canela aún están calientes, prepara el glaseado. Mezcla el azúcar glas con la mantequilla derretida, el extracto de vainilla y suficiente leche para obtener una consistencia espesa pero vertible. Sirve este glaseado sobre los rollos y observa cómo se derrite y se infiltra en cada espiral.
El momento de la verdad
Ahora, llega el mejor momento: prueba tus rollos de canela. La masa es esponjosa, el relleno es una mezcla perfecta de dulce y especias, y el glaseado añade una capa de dulzura que te saca una sonrisa sí o sí.
Cada bocado es una experiencia cozy, así que, la próxima vez que sientas la necesidad de algo reconfortante y delicioso, recuerda que tienes la receta perfecta para hacer tus propios rollos de canela en casa.
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