¿Amor o costumbre? Una incógnita difícil de resolver, pues se requiere un alto grado valor y mucha introspección para admitir que esa persona con la que has compartido tantos altos y bajos a lo largo de tu vida realmente no te llena. Hay una diferencia abismal entre amar a una persona y estar acostumbrado a ella, aunque saber reconocer estos dos factores puede llegar a resultar complicado. Con el paso de los años las relaciones se van volviendo más complejas, simplemente por el hecho de que esa ilusión que aparece en los primeros meses de noviazgo desaparece.
¿Estás enamorado o más bien te sientes cómodo? Te ayudamos a descifrarlo
Para entrar en una relación se necesita un alto grado de compromiso, pues quiere decir que estás dispuesto a compartirlo todo con esa persona: tiempo, afecto e, incluso aquellas cosas íntimas como la familia o vivencias pasadas. Si alguna vez has estado enamorado, sabrás que al inicio todo son mariposas en el estómago, detalles y felicidad, por eso se dice que no hay nada como los primeros meses. Después de un tiempo aparecen nuevos retos, esas situaciones que ponen todo de cabeza y es en este momento cuando te das cuenta si es la persona correcta para sobrellevar los momentos complejos que la vida presenta.
¿Cómo saber si es amor o costumbre?
Hay muchos cuestionamientos que puedes plantearte para llegar a la conclusión de que tu relación es menos amor y más costumbre. Para resolver la incógnita te recomendamos encontrar un espacio íntimo, desconéctate del exterior, toma el tiempo necesario para tener un diálogo contigo mismo y hazte las siguientes preguntas:
¿Me veo planeando un futuro con esta persona?, ¿realmente disfruto sus pláticas y compañía?, ¿mis muestras de afecto son automáticas o espontáneas?, ¿me molesta absolutamente todo lo que hace o dice?
Al contestarlas con honestidad y desde el corazón, podrás darte cuenta de cuál es el destino de la relación, recuerda que estar con alguien simplemente por miedo a perder su atención o compañía es un acto sumamente egoísta que no llegará a ningún lado.
Cuando tu relación cae en la costumbre es como si estuvieras viviendo una mentira, pues estás compartiendo tu vida con alguien a quien no amas, simplemente por el camino que han recorrido juntos hasta ahora o incluso por cariño que los une. Las películas, libros y series constantemente muestran amores eternos y, de cierto modo, ocultan el otro lado de la moneda, ¿qué pasa con esas historias que no tienen un “felices para siempre” al final de las páginas? Quizás el miedo a la soledad, costumbre o apego no les permite terminar con esa relación que dejó de nutrirse hace tiempo.
A través de su libro ¿Amar o depender? El destacado psicólogo Walter Riso invita a sus lectores a reflexionar sobre cómo el apego se disfraza de amor, lo que puede afectar fuertemente a la pareja. Si estás atravesando por una crisis te recomendamos leer este libro, pues aquí se muestran distintas perspectivas sobre la dependencia afectiva, cómo esta puede afectar de diferentes formas y lo que podemos hacer para evitarla.
Si a final de cuentas decides cortar desde la raíz esa relación que por tanto tiempo llevas cultivando es importante que tengas presente que el amor más incondicional es aquel que te das a ti mismo. Empieza a disfrutar los momentos que tienes a solas y mantén una mirada firme hacia el futuro pues nuevas oportunidades van a presentarse.