Es una característica muy común de los seres humanos el querer controlarlo todo, nos esforzamos constantemente para que cada una de las tareas que realizamos salga a la perfección y acorde al plan que plantemos dentro de nuestra cabeza. Cuando no conseguimos que las cosas salgan tal y como las visualizamos nos estresamos de sobre manera, por lo que tratamos de encontrar respuestas donde no las hay.
3 claves para dejar de sobrepensar
Aquí te dejamos una serie de consejos para que puedas frenar estos pensamientos destructivos y así utilizar el tiempo a tu favor y de manera más productiva.
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Es imposible evitar por completo esos días abrumadores en lo que pareciera ser que nada tiene sentido, pero podemos hacer que disminuyan de manera significativa si concentramos nuestra energía en las cosas que realmente resultan importantes, estas son tres cosas que puedes hacer para conseguirlo.
Visualiza el problema
Pon las cosas en perspectiva, muchas veces, las problemáticas que planteamos en nuestra cabeza son mucho menores de lo que parecen. Por eso, la próxima vez que le estés dando vueltas y vueltas al mismo asunto, te invitamos a plantearte la siguiente pregunta, ¿Esto será importante para mí en 5 años? ¿O incluso en unos meses? Esto te ayudará a darte cuenta de que ningún problema es tan grande, por lo que podrás dar vuelta a la página y continuar con tu día.
Enfócate en el presente
Muchas veces en lugar de vivir en el presente, viajamos al pasado y al futuro. Nos cuestionamos qué habría pasado si hubiéramos actuado de determinada manera e incluso nos preguntamos qué va a ser de nosotros el día de mañana concentrando nuestra energía en cosas que no han sido, y que además, no tenemos la certeza de que vayan a ser. Esto nos causa tanta angustia, que olvidamos que lo único asegurado que tenemos es el presente, por lo que tenemos que aprender a vivir día a día.
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No te preocupes, ocúpate
Estar constantemente preocupado no hará que tus problemas desaparezcan, si no que todo lo contrario, hará que aumenten. Es por esto que te invitamos a tomar acción: identifica que es lo que te está haciendo sentir ansioso y busca soluciones soluciones prácticas. Una buena técnica puede ser escribir tus tareas, de esta forma podrás visualizarlas y resultará mucho más fácil que puedas cumplir con cada una de ellas de manera exitosa.
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Esperamos que esto te ayude a darte cuenta de que debes centrar tu energía en cosas que resultan relevantes para tu día a día, ya que la felicidad de tu vida está en la calidad de tus pensamientos.
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