Mirador del Cerro del Gallego, vista de la Barranca de Urique de 1879 mts de profundidad(Hildeliza Lozano Garduño)
Caleb Torres García
Con un atractivo turístico tan único, grande e importante, es difícil elegir los sitios de interés favoritos para conocer, pues todos tienen algo que mostrar a sus visitantes, tanto en aspectos culturales e históricos, como gastronómicos.
Pero, seamos honestos, parte importante de los viajes son las fotos que queremos publicar en las redes sociales, y ahí precisamente es donde la cosa se pone todavía más complicada, porque el abanico de posibilidades en las montañas de Chihuahua, son casi infinitas (otra vez, literal).
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Cuando el fomento de turismo Ah Chihuahua nos invitó a regresar al estado grande, no lo pensamos dos veces. Ya hemos hablado de la capital y su alrededores, de las bondades de El Chepe y hasta de lo que hay que hacer en la Sierra Tarahumara, pero no hemos ahondado en lo más importante: en lo que se puede realizar dentro de las barrancas y cañones.
Esta maravilla de naturaleza es inmensa, pero para llegar a ella te recomendamos hacerlo desde la capital del estado, a donde se puede llegar en avión desde los cuatro puntos cardinales del país. Las barrancas están a menos de tres horas de la capital y por lo menos la mitad del tiempo estarás entre bosques de pinos y montañas, así que te aseguramos que no será un trayecto carretero tedioso.
Cascada de Baseseachi, Chiahuahua(Fomento Ah Chihuahua)
Creel debe ser tu centro de operaciones en este viaje, y de ahí debes lanzarte a los lugares que te mencionaremos a continuación. Todos están en las barrancas, así que debes llevar ropa cómoda, bloqueador solar y botas de montaña o para las rocas.
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Tienes que conocer la Cascada de Basaseachi, una de las más altas del país (con agua permanente), localizada entre una serie de cañadas, a tres horas de Creel. Ya ahí debes subir a una serie de miradores con espectaculares vistas, pero te aseguramos que toda la experiencia será 100% instagrameable (no olvides poner los hashtags #AhChihuahua y #VisitaChihuahua). Esto te tomará un día entero.
Ya de regreso en Creel, tienes que ir a Divisadero, donde las panorámicas son de 360 grados cuando estás dentro de los cañones. Ahí el senderismo es otra gran opción, pues existen decenas de caminos centenarios, trazados por los mismos rarámuri de la zona. También está la opción de hacerlo en zip rider (uno de los más largos del mundo), y hasta en un moderno teleférico.
Divisadero, Barrancas del Cobre(Hildeliza Lozano Garduño)
Todo esto lo puedes hacer en coche, pero el Chepe es otra opción, aunque nosotros lo recomendamos, al menos para las fotos, de Estación Bahuichivo hasta El Fuerte, en Sinaloa. Pero el caso es que es este pueblo chihuahuense donde puedes llegar para después moverte al Cerro del Gallego, donde, se demuestra que la naturaleza tiene una capacidad enorme de sorprender al ojo humano.
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Aquí verás la inmensidad de esta barranca, con casi dos kilómetros de profundidad. De ahí podrás ver el siguiente destino, el pueblo de Urique, localizado en la parte más baja de la barranca que lleva su nombre.
Para llegar hay que recorrer una hora más de camino (es de terracería pero, tranquilo, está en muy buen estado). En el pueblo también hay hoteles y dónde comer, además de un clima y paisajes tropicales que contrastan con los bosques de pinos de las partes altas.
Barrancas del Cobre(Hildeliza Lozano Garduño)
Obvio hay más cascadas, pueblos y atractivos naturales dentro y fuera de las barrancas, pero estos son nuestros favoritos. “Tienen que regresar, nuestra tierra tiene mucho más para los visitantes”, nos dijo Rita Meraz, del fomento Ah Chihuahua ,y toda una institución nacional en el medio turístico. Obvio le vamos a tomar la palabra.
