Aunque es muy joven, los lienzos para Paulette no son algo nuevo, comenzó a pintar desde que tenía 12 años; pero tenía que hacerlo como pasatiempo, pues sus papás creyeron que los estudios ‘normales’ serían una mejor idea a futuro, sin embargo, la pasión que Paulette imprime en cada trazo les ha ido demostrando que ella nació para pintar.
Paulette Betancourt, la nueva promesa Marble Pinter, orgullosamente mexicana
Como punto distintivo, Paulette cambió los lienzos tradicionales por el mármol y a partir de ahí ha sacado jugo a su creatividad para ir forjando su propio estilo dentro del arte.
Durante la pandemia Betancourt ha desarrollado una pieza que, según nos contó, ‘se vende como pan caliente’, unos triángulos de mármol en los que decidió pintar elefantes.
“Todo comenzó un poco por el aburrimiento de la pandemia, me fui a casa de mis papás y ahí tengo mi estudio, me sobraba un poco de mármol y así surgieron mis elefantes, a la gente le han gustado mucho y ha sido padrísimo cada que me encargan alguno”, relató.
Paulette estudió Turismo, por sugerencia de sus papás y tiene claro que si no se dedicara a la pintura, estaría realizando algo relacionado a esta profesión, pues también asegura que siente una gran pasión por la cocina.
Sin embargo, ella nació para pintar, su gran sello distintivo han sido los ojos, pinta ojos en todos lados, pues le apasionan las miradas. Su técnica hiperrealista ayuda a que sus piezas tengan un toque único.
“Los ojos me encantan, pinto ojos todo el tiempo y en todas las formas, hago platos, cuadros, todo lo que se pueda, miradas de humanos, de animales, me fascinan”, compartió.
Paulette compartió un consejo para quienes sueñan con seguir el camino de la pintura, o cualquier otra actividad artística.
“Aunque parezca difícil, hay que hacerlo, lo más difícil siempre es comenzar pero vale la pena cuando ves que una de tus obras de hace diez años está valuada en lo triple o cuádruple de cuando la vendiste originalmente”, expresó.
En septiembre de 2019 trabajo de la mano del pintor español hiperrealista Javier Arizabalo para aprender su técnica tan delicada y perfeccionista, en 2020 participó en un Work Shop con el pintor mexicano hiperrealista Omar Ortiz y forma parte de los 15 aprendices del pintor mexicano Lazcarro Toquero.