No todo ha sido malo en esta contingencia global en la que la angustia y la ansiedad parecen ser sólo dos consecuencias más del encierro. La naturaleza es sabia y nos lo demuestra con cielos más azules y el regreso de animales de a sus hábitats naturales. Aquí hay una gran lección por aprender: el problema principal somos nosotros.
Todo lo bueno que ha pasado en estos días de encierro humano
El sol sale para todos, y también en China
El escenario de los inicios de esta pandemia es quizá el más “afectado” por esta ola positiva del Covid- 19. El país asiático y una de las potencias económicas mundiales, es también uno de los más contaminados, pero desde que estalló la crisis en diciembre de 2019, la calidad del aire ha mejorado e incluso ha superado los niveles de pureza que se tenían hace más de una década. En lugares como Bombay, Sao Paolo, El Cairo y Ciudad de México también han sido notorios estos cambios.
La capa de ozono se recupera
Este es un tema bastante ochentero que habíamos aprendido a ignorar pero que hoy está de regreso y de forma positiva. Científicos de la Universidad de Colorado han demostrado que la estratosfera terrestre que evita que el sol nos calcine está cada vez más sana y robusta gracias a la disminución del uso de combustibles. ¿Las causas? La poca actividad industrial y menos automóviles en las calles.
Una baja en el calentamiento global
Todos vimos en las noticias como Groenlandia perdía sus glaciares en los meses pasados, pero parece que tanto el Ártico como el resto del planeta se están tomando un leve respiro ante esta esta situación a la que parecía que nos estábamos acostumbrando. Ríos más limpios, pocos incendios, mares con menos contaminación y una considerable disminución en los fenómenos naturales para los próximos meses nos hablan de la recuperación del medio ambiente.
Las tortugas recuperan las playas
“¡No son vacaciones!”, nos dicen los expertos, pero quienes sí hicieron bien en ignorar este tipo de recomendaciones fueron los animales marinos. En países como India se ha notado un aumento considerable en el arribo de tortugas que llegan a las costas para anidar. Miles de estos ejemplares han sido vistos en las playas de Odisha como lo hicieran hace un par de décadas, antes de que se pusiera de moda acaparar la arena con sombrillas y camastros. En México existen seis de las siete tortugas marinas conocidas en el mundo, tres de ellas en peligro de extinción.
Free Dumbo
Países como Tailandia e India basaron gran parte de su turismo en el uso de los elefantes para carga de materiales, paseos y shows. Ante la crisis sanitaria y la posterior caída de la industria turística internacional, estos animales han tenido que ser liberados al no poder ser alimentados y resguardados como antes. La falta de ingresos de sus “dueños” los ha obligado a dejarlos en libertad, por lo que los adiestrados animales se han reencontrado con sus familias en libertad. Los parques naturales del sur de Asia tiene ahora más habitantes y lo mismo ha ocurrido con otras especies como delfines y osos en otras partes del mundo.
Plantas y flores hasta en las banquetas
Europa vivió la segunda etapa mundial de la crisis con resultados catastróficos en España e Italia, pero fue también en ese continente en el que la naturaleza ofreció un espectáculo inesperado debido a la cuarentena obligatoria de sus habitantes. Millones de personas se han tenido que quedar en sus casas por semanas lo que ha dejado a las calles vacías, que sumados a un clima cada vez más cálido, ha provocado la germinación de miles de semillas que hibernaron desde el verano pasado. En países como Bélgica y Holanda, donde las flores son un símbolo nacional, el fenómeno ha sido más notorio incluso en las ciudades.
El regreso de las abejas
Se dice que sin ellas los humanos sobreviviríamos sólo cinco años, pero aunque no podemos decir que las colonias de estos insectos se han recuperado totalmente, de seguir con la pandemia, en los próximos meses será más común verlas en los jardines y bosques de todo el mundo. La cosa es sencilla; entre más aves y animales rumiantes: más plantas, que a su vez representan más flores y semillas, y por lo tanto; más abejas (que son las que polinizan ls flores). El círculo de la vida siempre estado ahí, pero la naturaleza nos lo recuerda de nuevo.