Elisa Carrillo, la mejor bailarina del mundo, nos revela su deseo para México
“Todavía no lo puedo creer”. Han pasado algunos días ya desde que Elisa Carrillo recibió, desde el legendario escenario del teatro Bolshoi en Moscú, el prestigioso Benois de la Danse, el máximo galardón al que un ejecutante puede aspiran en el ballet, y aún no ha tenido tiempo de digerirlo. Pero su mente tiene claridad respecto a sus próximos pasos: que México comience a tomar un lugar importante en el mundo de la danza.
Nos comunicamos con ella vía telefónica hasta Berlín, la ciudad en la que radica desde hace 12 años y en la que es la primera bailarina del ballet local. Esta conversación se desarrolla justo una hora y media antes de que ella deba subir al escenario con el resto de la compañía del Staatsballett.
“Fue una experiencia maravillosa que tendré guardada toda mi vida”, cuenta Carrillo sobre el momento que vivió acompañada de su madre, su esposo, el también bailarín Mikhail Kaniskin y su hija.
La bailarina de 38 años de edad comparte con Quién que se encontraba tranquila durante toda la gala. “Yo no veo a la danza como un concurso. Esto es un reconocimiento a mi trabajo, no lo veo como qué va a pasar si no lo hago bien, al contrario. Por eso estuve muy relajada en esa función y trate de disfrutar mucho de ese escenario”. Sin embargo confiesa que en el momento del anuncio de la ganadora en la categoría de mejor bailarina sintió un poco de emoción en el estómago. “Me dieron ganas de llorar", recuerda.
El Benois de la danse es el reconocimiento más importante que se otorga en el mundo del ballet. Pero para Elisa esto no significa un límite en su carrera, por el contrario, representa una motivación. “Digamos que es para mí aún más responsabilidad”.
La forma en que Elisa Carrillo asume esta etapa en su carrera es a través de su propia labor como bailarina e integrante del Consejo de Diplomacia Cultural que fue anunciado hace unas semanas por el Secretario de Relaciones Exteriores Marcelo Ebrard y la titular de la Secretaría de Cultura Alejandra Frausto. “Es importante que haya una proyección de México hacia el mundo, que se vea que somos un país que tiene talento en la danza y que tiene bailarines que están saliendo adelante”.
Aunado a esto, Elisa comenzó en febrero pasado su labor al frente de la Compañía Nacional de Danza junto al maestro Cuauhtémoc Nájera. Esta agrupación dependiente del Instituto Nacional de Bellas Artes ha vivido etapas críticas en los años recientes, uno de ellos la falta de un proyecto a largo plazo. Los planes de la bailarina número uno del mundo es apoyar a la compañía para que comience una etapa diferente con mayores oportunidades para los bailarines, el arribo de nuevos coreógrafos para que tenga una proyección internacional. Carrillo sabe que estoy llevará tiempo pero tiene la certeza de que “México comenzará a tomar un lugar importante en el mundo de la danza.”
Elisa Carrillo se prepara para una edición más de su festival Danzatlán que arrancará actividades el próximo 2 de julio con la Gala del Auditorio Nacional.