Emoción y touchdowns
El pasado domingo 19 de noviembre, en la Ciudad de México se respiraba un ambiente festivo, podía sentirse la adrenalina de miles de aficionados –77 mil 357 para ser exactos– que se unieron para disfrutar de un gran juego de la NFL apoyando a su equipo favorito; viendo a Tom Brady, una de las grandes leyendas de este deporte; o simplemente siendo parte de este evento. Desde muy temprano comenzó la gran guerra de gritos desde las tribunas: “¡Patriotas, Patriotas!”, “¡Raiders, Raiders!”, pero estos fueron opacados una vez que Brady apareció en el campo, ahogando las proclamas y coreando al unísono: “Brady, Brady”. Agradecido, el quarterback de los Patriotas –quien saludó de mano a algunos espectadores– expresó, “jugamos en un maravilloso estadio rodeado de gente que siempre apoya y demuestra el amor por nuestro equipo”.
Otras personalidades del mundo del deporte como Roger Goodell, comisionado de la NFL, y Robert Kraft, propietario de los Patriotas –equipo ganador con un aplastante marcador de 33-8 contra los Raiders– estuvieron presentes en el juego y antes de comenzar, también saludaron a los fanáticos.
Toda la emoción, los gritos y el apoyo del público se tradujeron en un éxito rotundo, por lo que el contrato de la NFL en México se extenderá por cuatro años más, y el siguiente, con los Raiders como locales. Esta fue la oportunidad para que la afición mexicana viera jugar a una de las dinastías y a uno de los quarterbacks más ganadores de todos los tiempos. ¿Estás listo para más futbol americano?