¿Qué pasa en tu cuerpo si no desayunas?

Efectivamente el desayuno es la comida más importante de tu día. Considera que tu cuerpo lleva al menos las 8 horas que estuviste dormida en ayuno. Al despertar, levantarte y comenzar con tu rutina diaria, tu cuerpo necesita obtener energía de algún lado. Si no se la das tú con un desayuno, la empezará a buscar en tus reservas.

Tu cuerpo no sabe que la razón por la cual no le estás dando alimento. Bien puede ser porque te quedaste dormida y no te dio tiempo desayunar o porque estamos en guerra y estás viviendo una hambruna. Cualquiera que sea el caso, tu cuerpo tratará de cuidar la grasa y almacenarla en vez de usarla, pues es la reserva para sobrevivir en emergencias. Entonces empezará a romper otras moléculas, como las proteínas del músculo, para obtener la energía que necesitas para seguir adelante.

Entonces, el no desayunar no sólo no hace que pierdas peso, sino que facilita el que acumules grasa y aumente tu riesgo de padecer sobrepeso u obesidad. A esto agrega que el no desayunar te deja con mucha hambre, lo que seguramente provocará que comas en exceso en la siguiente comida que hagas.

Además, pones a trabajar a todos los sistemas de emergencia para obtener energía. A la larga, culminará en un mal funcionamiento de los mismos, que se traduce en problemas metabólicos y cardiovasculares, como diabetes e hipertensión.

Finalmente, el cerebro utiliza el 50% de la energía que circula en forma de glucosa en la sangre. No desayunar no sólo afecta tu productividad y concentración en el trabajo o en la escuela, sino hasta tu estado de ánimo. También el cerebro comenzará a pedirte cosas con azúcar para tratar de seguir funcionando correctamente, como galletas, dulces, chocolates, etc.

Hagámosle caso a nuestras mamás. Así sea algo rápido y ligero, como un licuado, no salgas de casa sin haber desayunado.