Gerard Piqué, ex futbolista y empresario, fue sometido este jueves a un interrogatorio crucial en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Número 4 de Majadahonda, España.
El proceso judicial investiga posibles irregularidades en el traslado de la Supercopa de España a Arabia Saudí, un acuerdo que involucra a la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), la empresa saudí Sela Sports y Kosmos, la empresa de Piqué.
Durante su declaración, Piqué se mostró visiblemente afectado, llegando incluso a las lágrimas, mientras defendía la legalidad de las comisiones que su empresa recibió.
Según la investigación, Kosmos habría percibido 4 millones de euros anuales por su rol como intermediario en el contrato firmado en 2019, cuando Piqué aún formaba parte del FC Barcelona. Dicho acuerdo aseguraba 400 millones de euros para la RFEF y 40 millones para Kosmos, si se cumplía en su totalidad.
Las acusaciones en su contra incluyen presuntos delitos de corrupción en los negocios, administración desleal y blanqueo de capitales. La Guardia Civil considera a Piqué una figura clave en las negociaciones y señala que su intervención favoreció más a la RFEF que a la empresa saudí Sela Sports. Además, se ha cuestionado la ética de su participación en este tipo de acuerdos comerciales siendo un futbolista activo en ese momento.
Como parte de su defensa, el ex futbolista presentó 15 facturas emitidas por Kosmos a la Federación de Fútbol de Arabia Saudí por un total de 12 millones de euros, acompañadas de comprobantes bancarios. Piqué argumentó que las comisiones eran habituales en este tipo de acuerdos y que el trato inicial fue un “pacto de caballeros” sin la firma de un contrato formal.
Gerard Piqué, nacido en Barcelona en 1987, es considerado uno de los mejores defensores de su generación. Tras debutar profesionalmente con el Manchester United en 2004, regresó al FC Barcelona en 2008, donde ganó 30 títulos, incluidas tres Champions League y ocho Ligas. También fue fundamental en la selección española que conquistó el Mundial de 2010 y la Eurocopa de 2012. En 2022, anunció su retiro del fútbol.
Después su retiro, Piqué se dedicó a los negocios. Es dueño de Kosmos, la empresa que revolucionó la Copa Davis de tenis, y del FC Andorra. Además, ha realizado inversiones en sectores como los e-sports, gafas de sol y bienes raíces.
Sin embargo, su éxito empresarial ha estado marcado por controversias. El caso de la Supercopa ha puesto en entredicho su ética profesional, aunque él sostiene que todas sus operaciones han sido transparentes y legales.
La investigación sigue su curso, y el juez deberá decidir si archiva el caso o lo lleva a juicio. Mientras tanto, Piqué enfrenta un daño a su imagen pública, pero se mantiene firme en su defensa de que todo se realizó dentro del marco legal.
