Aunque dio la que para muchos fue la actuación más importante de su carrera, fue ignorada por el Oscar. Sin embargo, a Pamela Anderson eso parece no importarle y, por el contrario, disfruta el momento actual que vive ya que aseguró que por primera vez se siente "como una actriz".
Estrella y víctima durante años del star system de Hollywood, gracias en gran medida a sus apariciones en la revista Playboy y a su trabajo en la serie Baywatch (Guardianes de la bahía), la actriz de 57 años se libera de su imagen de símbolo sexual en la película The Last Showgirl, dirigida por Gia Coppola, nieta del director Francis Ford Coppola.
"Me gusta el lado salvaje y desordenado de mi vida, porque tengo muchas cosas de las que aprender, muchas experiencias", aseguró la actriz en entrevista con AFP.