Tras varios días hospitalizado, Daniel Bisogno murió el pasado 20 de febrero a los 51 años a causa de varias complicaciones que le sobrevinieron luego del trasplante de hígado al que fue sometido en septiembre pasado.
Sin embargo, el presentador no tuvo funeral y sus restos fueron cremados el mismo día de su muerte por una importante razón. Su hermano, Alex Bisogno reveló que tanto él como su familia tomaron la decisión de no despedir al conductor de Ventaneando en una funeraria pues buscaron cumplir su último deseo.