En 2013, Eugenio Derbez estrenó la película No se aceptan devoluciones en la que mostró otra faceta como actor y comediante, y a la vez, hizo su debut en la actuación una niña de nueve años llamada Loreto Peralta.
La mancuerna fue muy exitosa y la película conquistó a millones de personas, incluso rompió récords de taquilla. A partir de ahí, Eugenio y Loreto han creado una gran amistad que ha perdurado a lo largo de los años.