Robert De Niro se presentó esta semana en un juzgado de Manhattan, en Nueva York, para dar su declaración sobre la demanda de su antigua asistente personal, Graham Chase Robinson.
Esta empleada se ganó la confianza absoluta del actor, hasta el punto de que no dejó de escalar posiciones hasta ser designada vicepresidenta de la productora del artista, Canal Productions.
A partir de ese momento, su relación empezó a deteriorarse y ahora Robinson decidió llevar a su antiguo jefe a los tribunales, acusándolo de haber creado un ambiente laboral "tóxico", marcado por la discriminación por razón de género y el abuso de autoridad.
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Ex asistente de Robert De Niro demanda al actor por presunto abuso laboral y discriminación
De acuerdo con la transcripción que trascendió, el actor de Hollywood no pudo evitar perder los estribos al escuchar el listado de acusaciones de su ex empleada, quien le exige además una indemnización de 12 millones de dólares.
"¡Todo esto es absurdo!", dijo el actor, algo que podría resultarle contraproducente al intéprete, tomando en cuenta que Robinson asegura que De Niro la insultaba con frecuencia, usando términos como 'perra', y que la hablaba "de manera hostil, abusiva e intimidante".
La demandante no dudó en retratar al actor como un hombre rencoroso, que ni siquiera se dignó a escribir una carta de referencia cuando Robinson decidió poner fin a su relación laboral. Quien fuera mano derecha de De Niro trabajó con él desde 2008 hasta 2019, momento en el que decidió renunciar por el hartazgo que acumulaba.
Robert de Niro.(Andreas Rentz/Getty Images)
Entre sus muchas responsabilidades, alega, destacan actividades tan variadas como la de decorar el árbol de navidad del actor, o la de ocuparse personalmente de sus cuidados en momentos de enfermedad.
A lo largo del juicio, De Niro habría perdido la calma en otras ocasiones, como cuando se defendía de los reproches que Robinson también le hace a la actual cpareja del artista, Tiffany Chen.
Y es que, la ex asistente acusa a la novia del actor de haberla maltratado verbalmente, entre otras razones porque Chen pensaba que Robinson "imaginaba" que su relación con su jefe era más "íntima" de lo que realmente era. "Ella [Chen] sentía que podía haber algo ahí, y puede que tuviera razón", aseguró De Niro.
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Robert De Niro reacciona con furia a las acusaciones de su ex asistente
Por otro lado, el actor de Hollywood confirmó con su silencio y muecas de incomodidad que Robinson era su contacto de emergencia y que le encargaba tareas tan cotidianas como la de comprar tarjetas de felicitación para sus familiares, incluso siendo la vicepresidenta de su empresa.
"Pero no después de todo lo que estoy pasando ahora", afirmó con resentimiento.
Robert De Niro habría levantado la voz, una vez más, cuando el abogado de Graham Chase Robinson le pidió que corroborara otro testimonio de su clienta: el de que el actor no dudó en llamarla a las "cuatro o cinco" de la madrugada para que le ayudara tras una fuerte caída, en el año 2017.
"Pero eso fue cuando me quebré la espalda tras caerme por las escaleras", contestó indignado ante la sugerencia de que esa emergencia no señalaba una explotación laboral.
Graham Chase Robinson (Getty Images)
Ese profundo malestar de Robert De Niro se traduce en dos contrademandas, una procedente del propio De Niro y otra de su firma Canal Productions.
A Robinson se le atribuyen prácticas tales como la de defraudar miles de dólares a la empresa mediante el uso fraudulento de tarjetas de fidelidad de aerolíneas, o la de dedicarse a ver la televisión en horas de trabajo. Asimismo, el actor la describió en su declaración como una mujer "condescendiente, abusiva, controladora y despectiva".
