Talina Fernándezmurió el pasado 28 de junio a los 78 años de edad a causa de una leucemia que desconocía que padecía. Desde entonces, su familia ha hecho todo lo posible para mantener vivo su legado y su recuerdo, así que el día que hubiera cumplido un año más de vida, no pasó desapercibido.
El pasado 2 de agosto, la conductora habría cumplido 79 años y su familia no dejó pasar desapercibida tan memorable fecha.
Los tiernos mensajes de los nietos de Talina Fernández
Los hijos menores de la fellecida Mariana Levy, Paula y José Emilio, recurrieron a sus respectivas cuentas en redes sociales para dedicarle un emotivo mensaje a su fallecida abuela.
Paula compartió en su cuenta de Instagram una foto de Talina Fernández junto a otra de Mariana Levy. Sobre el collage escribió: “Celebrando su primer cumpleaños juntas después de tanto”, en referencia a la muerte de su mamá en 2005.
Por su parte, José Emilio también compartió una foto en la que aparece de niño junto a su abuela. “Feliz cumpleaños, babi, besos hasta donde estés”, escribió. Además, le pidió un favor a la fallecida conductora. “Abraza a mami por mí”, agregó.
Sin embargo, María Levy, quien fue la más cercana a Talina Fernández, fue la única que no publicó nada en esta fecha. Estas publicaciones también se dan en medio de los problemas que han tenido los jóvenes por la herencia de Mariana Levy, que, a 18 años de su fallecimiento, aún no se ha repartido.
Los restos de Talina Fernández fueron arrojados al mar
El pasado 19 de julio, a poco más de un mes de la muerte de Talina Fernández, su familia cumplió su última voluntad: esparcir sus cenizas en el mar, así lo dieron a conocer a través de redes sociales.
En la cuenta de Instagram de la ‘La Dama del Buen Decir’, publicaron una foto de ese atardecer con la leyenda: “Ya descansando en mi elemento”.
Pato Levy, el menor de los hijos de Talina Fernández, compartió en entrevista para el programa Sale el Sol que él fue quien llevó a cabo la ceremonia en Acapulco en compañía de su esposa, sus hijos y una amiga de la infancia de su mamá.
“Rentamos un barquito hacia el mar abierto, en un atardecer hermoso, llevamos sus cenizas, unos caracolitos, fruta, flores, todo para regalarle al mar, lo que para mi madre significaba el mar. Estuvo muy emotivo", relató.