El cantante británico Roger Waters está en una investigación policiaca debido a la posible incitación al odio después de que su show del pasado el 17 de mayo en la sala Mercedes-Benz Arena de Berlín fuera condenado por el Ministerio de Exteriores israelí.
El vestuario que eligió para la presentación con claras referencias a la ideología de nazi es "hiriente" para la dignidad de las victimas" y susceptible para "alterar el orden público", declaró un portavoz de la policía a la agencia EFE.