Como ya nos tienen acostumbrados la familia Kardashian, las fiestas de cumpleaños son el pretexto perfecto para llenar de lujos a sus hijos. Ahora, Psalm, el menor de los hijos que Kim Kardashian tuvo con Kanye West se convirtió en bombero por un día para celebrar su cumpleaños número cuatro.
Fue el fin de semana que la empresaria festejó a su hijo, quien tal parece es un gran fanático de los bomberos. Según compartió Kim en sus redes sociales, toda su casa se convirtió en la estación llamada ‘Psalm’s Fire Department’.