Desde hace tiempo, Katy Perry vive una temporada con muchos compromisos profesionales. Además de las responsabilidades que tiene como mamá de la pequeña Daisy Dove, la cantante regresó con entusiasmo al concurso cazatalentos American Idol, al mismo tiempo que prepara una gira mundial con la que busca recuperar su trono en el mundo del pop.
Tantas ocupaciones necesitan que la artista se esté en un perfecto estado físico y mental, por lo que decidió alejarse completamente del alcohol durante tres meses.