Ariana Grande se reunirá con el príncipe Eduardo en los próximos días y se rumorea que él podría aprovechar la ocasión para tantear el terreno y ver si la estrella del pop estaría interesada en actuar en el concierto que se celebrará en honor a la coronación de Carlos III.
Hasta ahora la monarquía se ha topado con bastantes problemas a la hora de fichar a artistas de renombre internacional para que formen parte del espectáculo: Elton John -la opción preferida del monarca- está ocupado con su gira por Europa y tanto Adele como Ed Sheeran han dicho que no.
Se cree que la cantante de 'Thank U, Next' conocerá al hermano menor del monarca esta misma semana cuando acuda a visitar el estudio donde ella está rodando su próxima película: la adaptación al cine del musical Wicked.
El encuentro podría ser la oportunidad perfecta para que Eduardo le proponga a Ariana que se una al cartel de cantantes encabezado por el grupo por Take That sin Robbie Williams, Kylie Minogue, Lionel Richie y Olly Murs. Y si ella se mostrara interesada, entonces se extendería una invitación oficial.
Desde el círculo de Ariana han adelantado que probablemente diga que no, pero la esperanza es lo único que muere al último y parece que desde el palacio de Buckingham quieren aprovechar para hacerle una oferta 'en persona' a través de Eduardo.
Por el momento, el concierto que tendrá lugar en el castillo de Windsor el 7 de mayo no ha conseguido reunir el mismo plantel de estrellas que los festejos por el Jubileo de Platino de la fallecida Isabel II, que contó con Ed Sheeran, la banda Queen acompañada de Adam Lambert, Diana Ross, Alicia Keys, Elton John, Craig David y Sir Rod Stewart.
La única baza que podría salvar el espectáculo sería la aparición sorpresa de las cinco Spice Girls: algunas fuentes afirman que la monarquía sigue negociando con la banda, pero parece poco probable que Victoria Beckham se anime a regresar a los escenarios.
La última vez que lo hizo fue con motivo de la clausura de los Juegos Olímpicos de Londres en 2012, y desde entonces se ha negado a retomar su faceta como cantante. Sus compañeras tuvieron que irse de gira sin ella en 2019 y ni siquiera se acercó a verlas en alguno de sus conciertos, probablemente para evitar que intentaran presionarla para que se uniera a alguna de las canciones.