Melissa Schuman, por su parte, acusó públicamente a Nick de haberla violado a principios de la década de 2000 cuando trabajaron juntos mientras ella aún formaba parte del grupo Dream por medio de una entrada de su blog que publicó en 2017.
El cantante afirma que ambas mujeres son unas "oportunistas" que solo pretenden aprovecharse del movimiento #MeToo para "extorsionarlo". Según los documentos obtenidos por la revista People, el artista de 43 años alega que las mujeres orquestaron hace cinco años una conspiración para "difamarlo y "arruinar de cualquier otra manera posible su reputación con el propósito de obtener atención y fama y/o extorsionarle".
Nick alega que la pareja se propuso "destruir vidas inocentes" y que ha perdido alrededor de 3 millones de dólares en distintos negocios que se han venido abajo por sus problemas legales.
En los documentos que presentó para apoyar su demanda, Nick describe a Ruth como "un individuo vulnerable y altamente impresionable, ansioso de atención y desesperado por encajar" que ha sido manipulado por Melissa y por el papá de esta, Jerome Schuman, para que defienda una mentira.
De hecho, él ni siquiera está seguro de que hayan llegado a conocerse en persona y sigue manteniendo su inocencia ante las acusaciones en su contra.