Han pasado cerca de dos meses desde que Céline Dion emitió uno de sus comunicados más duros hasta la fecha.
La artista canadiense reveló que padece el síndrome de la persona rígida, una dolencia que le provoca espasmos y agarrotamiento muscular, que afecta a todo su cuerpo y también a sus cuerdas vocales, su principal instrumento de trabajo. La diva de la música no tuvo más remedio que cancelar todas sus actuaciones programadas para este año, al tiempo que desaparecía temporalmente de la vida pública para centrarse en su recuperación.