'Acapulco' sigue cambiando la vida de Eugenio Derbez, Enrique Arrizon y compañía

"Para mí (Acapulco) ha sido un parteaguas, por mucho es el personaje que más dichas me ha dado, que más retos me ha puesto y que más amigos me ha dado", aceptó el coprotagonista del serial, Enrique Arrizon (Máximo Gallardo). El actor aseguró que "me esfuerzo todos los días para hacerlo mejor, entregué todo y me encanta el resultado".

Para Enrique hay una suma de cualidades en el contenido que ayudaron al gran despunte de las dos temporadas de Acapulco y que ahora se haya autorizado una tercera. "La gente se siente identificada y se sumergió en toda la historia", y lo dejó muy en claro, para él Eugenio, a lo largo del tiempo que llevan trabajando juntos, ha sido "un ejemplo a seguir".

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La producción de Apple TV+, aseguró Arrizon, dejó de ser la historia de vida de una sola persona, para hacerse masiva, es el relato de "toda la comunidad latina que está intentando ser parte de Estados Unidos o de cualquier lugar del mundo; los migrantes quieren adaptarse, cuando se mudan es porque quieren una vida mejor, superarse y aportar algo a la sociedad".

Para Fernando Carsa (Memo) Acapulco lo ha sido todo en cuanto a su carrera en la pantalla chica, comenzó en teatro y este programa le abrió las puertas a un desarrollo profesional distinto al que tenía, por lo que se siente agradecido. "¡Me gané la lotería!", comentó con el orgullo de saber que más que suerte ha sido su talento el que lo mantiene ahí.

En su renovación, Acapulco planteará en 1985, que el joven Máximo continúa su ascenso por el éxito mientras pone en peligro todas las relaciones que ha trabajado tan duro para construir, ¿Memo dejará de ser su Sancho Panza? Aunque eso pase en el ficción, Enrique y Carsa nos mostraron que lograron transpolar la ficción a la realidad y ellos son los mejores amigos.

Por lo que pase lo que pase en la tercera entrega, ellos serán siempre aliados y hermanos por elección, seguros de que el éxito llegó también gracias a que en la serie que encabezan, el viaje a años pasados ha enamorado al público. "Hay un factor de nostalgia que gusta, la gente quiere revivir esos momentos y Apple TV+ representa muy bien los 80", consideró Arrizon.

Otro elemento vital que ve Enrique en el triunfo que llevó a la plataforma de streaming a aceptar este regresar a los sets, es que el escenario en el que se desarrollan, el hotel Las Colinas, es "un personaje más, tenemos la libertad de jugar con el vestuario, el make up, los peinados, creo que es muy divertido contar una historia en otra década".

Para Arrizon conocer el reto que significaba tratar de resolver algo sin la ayuda de la tecnología, que supuestamente nos conecta más, fue la garantía. "Cómo se pueden tejer estas historias en un mundo en el que la comunicación era distinta y lo más interesante es que a pesar de que ya pasaron 40 años, emocionalmente las cosas no han cambiado, entiendo más a mis papás y abuelos", dijo.

Carsa aceptó que el retrato de los 80 le permitió observar cómo muchas cosas se crearon y hoy se ven los frutos de esa innovación. "Somos parte de esa generación que está tratando de repetir lo que ya pasó, tenemos esa cosquillita de querer saber cómo eran las cosas antes, cuando todo era nuevo, cuando se creó y sorprendernos como si realmente estábamos en esa época", expresó.

Oportunidades para los extranjeros también

En Acapulco las cosas son parejas y así como Derbez impulsa a los latinos, también tiene entre sus filas al español Rafael Cebrián (Héctor) y los estadounidense Chord Overstreet (Chad) y Jessica Collins (Diane) así que en la serie, como en el puerto mexicano mismo, que fue el hot spot para varios en décadas pasadas, las oportunidades son para todos.

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"Recibí tanto amor y entendimiento, cuando empecé el show no sabía nada de español y estaba rodeada del crew y todo estaba en el idioma; todos fueron tan pacientes en lo que aprendía, sólo recibí amabilidad y esa es una de las muchas alegrías de trabajar con gente que es de todas partes del mundo, fue una experiencia increíble", mencionó Jessica.

Eugenio, consideró Rafael, está haciendo una labor importante y más que necesaria en la apertura de la industria de EE.UU. para recibir a todos aquellos que quieren mostrar sus capacidades: "Está abriéndonos las puertas a los nuevos talentos latinos y a las nuevas generaciones de hispanohablantes, con lo que no hay nada más que decir".

La trama de Acapulco, al hacer reír, cumple una misión, enfatizó Collins: "Nunca había sido más necesaria la comedia, sé que yo quiero reír, busco series que me divierten, me hacen reír, me hacen sentir bien y esperanzada con respecto al mundo. Muchos de los temas que tocamos siguen siendo las preocupaciones, triunfos y problemas de hoy. Es un show muy positivo".

Los actores están orgullosos que la producción en la que están ayude a la gente a atravesar pérdidas por el Covid-19, la depresión y ese es un poder de la comedia, hacer algo bueno. "La mejor comedia es que la imita la vida, nuestra serie viene del amor y no tratamos de enseñar lecciones, sólo mostrar que hay valores; las cosas como son y si te resuena, sal y has algo", comentó Cebrián.

Chord nunca imaginó formar parte de un programa en el que se hablara tanto español como inglés y agradeció la oportunidad de conocer aún más cultura y disfruta el ponerse el "uniforme" de su personaje y el poder divertirse: "Mi cosa favorita del show es la ropa y lo grande que es todo".

Camila Pérez (Julia) analizó finalmente que en Acapulco vemos a mujeres empoderadas: "Como artista a veces soy insegura, pero Julia es muy segura de lo que ofrece, encuentra la fuerza para hablar, el girl power lo tiene; qué lindo que haya personajes así y que se reflejen las niñas en una mujer latina acercándose a un sueño tan grande, inspira".