Nicolas Cage está en una edad en la que tiene miedo de consumir drogas. El actor de 58 años admitió que mientras contrató al amigo de la familia Tony Dingman para que fuera su “entrenador de bebidas” para la película de 1995 Leaving Las Vegas, no usó una táctica similar para las escenas en El peso insoportable del talento masivo en el que el personaje de Cage, una versión ficticia de sí mismo, toma LSD.
Nicolas Cage confiesa que teme recaer en sus adicciones
Cuando la revista Empire le preguntó si tenía un entrenador para estas escenas solamente soltó la risa: “No, a mi edad me da bastante miedo hacer un viaje. Nunca había hecho algo así. Una vez hice algo con hongos que no funcionó muy bien para mí, así que eso me asusta”.
Interpretarse a sí mismo en la pantalla era una perspectiva aterradora, pero Cage estaba ansioso por retratar a su yo más joven desde una aparición infame en el programa Wogan en 1990, que lo vio desnudar su pecho para presentar a Terry Wogan.
“Puedo decirles que estaba realmente aterrorizado por todo el asunto. Por supuesto, porque tenía tanto miedo, mi instinto fue moverme hacia eso. Quería interpretar [alter ego juvenil] Nicky. Pensé que sería un experimento divertido volver e intentar interpretar a ese tipo que estaba en el programa -Wogan- actuando como un completo idiota”.
A pesar de adoptar una versión satírica de sí mismo para la película, Nicolas Cage ha insistido en que no le gusta ver sus propias películas. “Trato de no hacerlo. Una vez que termino con algo, trato de seguir adelante. No quiero quedarme estancado. Quiero pensar en lo que sigue”.
Mientras tanto, el año pasado, la estrella de Hollywood admitió que está contento de haber dejado atrás la personalidad desagradable de la aparición de Wogan en la vida real.
“Ese era Nic en 1990 y estoy muy contento de no ser más como esa persona. Pero estaba feliz de traerlo de vuelta. En realidad, tengo momentos muy tranquilos en casa, leyendo con mi gato”.