Han pasado 10 meses desde que Kourtney Kardashian decidió interrumpir su tratamiento de fertilidad, ligado al proceso de fecundación in vitro al que se había sometido para volver a ser mamá junto a su actual esposo, el músico Travis Barker.
Kourtney Kardashian empieza a librar secuelas de tratamiento de fertilidad
Durante casi un año, la estrella televisiva ha tenido que sobrellevar con resignación el impacto físico y mental después de duro procedimiento, desafortunadamente sin resultados. La hermana de Kim Kardashian todavía no ha descartado por completo un nuevo intento para quedarse embarazada, pero por el momento se consuela con la forma en que, poco a poco, va recuperando sus fuerzas y energía.
"Por fin he empezado a recuperar mi energía, 10 meses después de parar el tratamiento por fecundación in vitro. Para aquellas mujeres que estén pasando por lo mismo, que sepan que se mejora", escribió con ilusión en su cuenta de Instagram al tiempo que compartía una foto que la retrataba de vuelta en el gimnasio.
En una entrevista reciente, el propio Travis reconocía que, hasta cierto punto, Kourtney se había sentido "presionada" sobre ampliar su familia, lo que supuso una intensa lucha interna para la celebridad.
Sin embargo, la empresaria ya tiene tres hijos, Mason, Penelope y Reign, con su antigua pareja, Scott Disick, mientras que el artista es padre de dos hijas Alabama y Landon, con su exmujer Shanna Moakler. Ambos forman, por tanto, una familia moderna.