Kourtney Kardashian y Travis Barker se han convertido en la típica pareja que consigue incomodar a todos los que se encuentran a su alrededor con sus excesivas muestras de afecto.
Da igual si se encuentran en un viaje en Disneyland con sus hijos, visitando una mansión que planean comprar o en una cena familiar. La empresaria no tiene reparo en sentarse sobre las piernas de su esposo, abrazarlo por el cuello y comérselo a besos.
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Pero su sello particular es sacar la lengua y chupar o acariciar con ella la de su pareja. Las caras que puso su ex, Scott Disick, cuando los vio actuando de esta forma enfrente de él no tuvieron precio, y por suerte quedaron grabadas para la posteridad por las cámaras del reality The Kardashians.
Ahora Kourtney reveló por fin que esa forma tan particular de besarse responde a motivos puramente prácticos. "No quiero mancharlo y no quiero arruinar mi lápiz labial, pero tampoco no queremos besarnos, así que nos besaremos con la lengua. Por eso nos besamos así", explicó en la sección de confesionario de la serie.
Teniendo en cuenta que ella pasa varias horas en el área de maquillaje y peluquería antes de grabar o de posar en una alfombra roja, se puede considerar una detalle admirable para con los artistas con los que trabaja.
Por otra parte, Kourtney siempre ha defendido su apasionada relación con el roquero recordando que no le están haciendo daño a nadie y que además resulta muy beneficioso para sus tres hijos pequeños contar con un modelo afectivo tan positivo, que no habían visto nunca reflejado en sus propios papás.
Kourtney Kardashian y Travis Barker se casaron el pasado mes de mayo tras más de un año de noviazgo, sin embargo, se reveló que actualmente tienen casas separadas en las que viven con sus respectivos hijos y, aunque "habrá" un hogar conyugal en el futuro, quieren que sus pequeños estén lo más cómodos posible.
Kourtney -que tiene a Mason, de 12 años, Penelope, de diez, y Reign, de siete, con su ex novio Scott Disick- explicó: "Queremos que nuestros hijos también se sientan cómodos y ambos han vivido en sus casas toda su vida en su mayor parte. Cada uno tiene su habitación y estamos a una calle de distancia", dijo a su paso por el podcast Not Skinny, Not Fat.