Carlos Rivera abrió su corazón para hablar de los momentos complicados que ha vivido tras la muerte de su padre, José Gonzalo Gilberto Rivera, que falleció víctima de un infarto.
A pesar del dolor, el intérprete se ha mostrado fuerte para continuar con sus compromisos laborales y, durante la entrevista concedida al canal de YouTube delarosatv, aseguró que su padre siempre le inculcó el sentido de la responsabilidad y el respeto al público.
“Son tiempos duros, pero al final hay muchos compromisos por cumplir y hay que seguir por lo menos. Como siempre conté, mi papá era mi fan número uno y era lo que más le gustaba, verme llegar a otros lugares y por eso seguimos avanzando, aunque sea difícil en estos primeros… lleva apenas tres semanas, entonces es un poco duro”, explicó.
A su llegada al Aeropuerto de la Ciudad de México proveniente de la entrega de un premio en Tenerife, España, Rivera contó que pudo cumplir el deseo de su padre, convertirse en un cantante reconocido a nivel internacional.
“Era su alegría máxima, verme cantar, ir a mis conciertos, todo, y bueno ¿qué te digo?, me acompañó mucho en muchos lugares, fue a muchos conciertos que le tocó verme fuera de México, Viña del Mar, en Argentina, en Centroamérica, en España... espero que haya tenido muchas alegrías”, comentó.
Carlos Rivera confesó también que fue un sueño cumplido que su padre pudiera verlo formando una familia junto a Cynthia Rodríguez. "Le tocó vivir conmigo todavía este año muchos momentos muy especiales y, bueno, al final, la vida decidió que se fuera a descansar y vamos poco a poco".
Finalmente, el cantautor mexicano expresó su gratitud con la gente que le ha demostrado su apoyo y afecto en estos momentos tan difíciles.
“Al final lo primero que te toca pasar es muy duro, además él quería ir a ese concierto, la última llamada que tuve con él fue que quería ir a ese concierto y, bueno, sí fue un poquito duro, pero al final uno como artista recibir el cariño de la gente, se convierte en algo, como una bendición, de que en un peor momento recibir tanto cariño, pues es como un poquito, un apapacho al corazón”, concluyó.
