En 2017, Bradley Cooper e Irina Shayk se convirtieron en papás cuando nació Lea, pero dos años después, concluyó su relación. Sin embargo, se dice que ahora están considerando retomar su romance tras disfrutar de unas vacaciones junto a su hija, incluso, piensan en ampliar la familia.
Una fuente cercana a las estrellas aseguró a Page Six que “fue una escapada familiar y están considerando volver a estar juntos. A ella le gustaría que su hija tuviera un hermano. Ambos no han tenido una relación formal con nadie más desde que se separaron y les gusta la idea de tener otro hijo".