Al inicio de la película Vaselina (1978), Betty Alexander Rizzo y Sandy Olsson comienzan siendo amigas cuando ésta última ingresa a la preparatoria Rydell en California y otras chicas la invitan a formar parte del grupo de chicas The Pink Ladies.
Pero el panorama cambia cuando Rizzo, interpretada por Stockard Channing se entera que Sandy (Olivia Newton John) pasó sus vacaciones de verano en la playa con Danny Zuko (John Travolta), su antiguo romance.
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En la vida real, Olivia y
Stockard fueron muy buenas amigas
Rizzo se convierte en su rival de amores durante gran parte de la historia fílmica, siendo, incluso, quien se encarga de orquestar burlas en su contra con el apoyo de las pink ladies como cuando juntas cantan aquel memorable tema de Look at Me, I’m Sandra Dee en la pijamada que Frenchy organiza en su casa.
Sin embargo, en la vida real, el rodaje de Vaselina fue el pretexto perfecto que las conectó como amigas para siempre y fue así que Stockard Channing, profundamente conmovida por la muerte de Olivia Newton-John, le dio el último adiós.
"No sé si he conocido a un ser humano más encantador. Olivia era la esencia del verano: su sol, su calidez y su gracia son lo que siempre me viene a la mente cuando pienso en ella. La echaré muchísimo de menos", declaró Stockard Channing a People.
John Travolta, otro de los protagonistas de Vaselina, fue uno de los primeros en pronunciarse tras darse a conocer la triste noticia.
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El triste adiós que le dio John Travolta
"Mi queridísima Olivia, hiciste que nuestras vidas fueran mucho mejores. Tu impacto en mi vida fue increíble. Te quiero mucho. Nos veremos en el camino y estaremos todos juntos de nuevo ¡Tuyo desde el primer momento que te vi y para siempre! ¡Tu Danny, tu John!”, escribió en su Instagram como pie a una foto de ella en su juventud.
La noticia de la muerte de Olivia Newton-John fue revelada a través de las redes sociales de la actriz. “Falleció pacíficamente en su rancho en el sur de California esta mañana, rodeada de familiares y amigos", señaló la publicación.
Después de alcanzar la fama mundial con Vaselina, la actriz continúo su carrera en otras películas, pero fue en 1992, a los 44 años, cuando su nombre volvió a cobrar relevancia al anunciar que le habían diagnosticado cáncer de mama.
Desde entonces, Olivia Newton-John tuvo que pasar por distintos tratamientos para luchar contra la enfermedad; sin embargo, 27 años después del primer diagnóstico, anunció que el cáncer le había regresado por tercera ocasión y que se encontraba en terapia por un tumor en la parte inferior de la columna.