Este lunes se confirmó que Lea Michele sustituirá a Beanie Feldstein como Fanny Brice en la nueva representación de Funny Girl en Broadway después de que la segunda decidió desvincularse del proyecto antes de lo que estaba previsto por diferencias creativas con los productores.
El oscuro pasado de Lea Michele en Glee opaca su sueño de actuar en Funny Girl
Lo que supuso un golpe profesional para una de ellas, se convirtió en una oportunidad única en la vida para la otra porque la antigua estrella de Glee siempre había soñado con interpretar ese personaje. De hecho, tuvo la oportunidad de hacerlo -más o menos- cuando su alter ego en la mencionada serie, Rachel Berry, conseguía su primer trabajo profesional en el teatro musical.
Para Lea también resulta un momento muy especial porque supone en muchos sentidos su 'regreso' tras las críticas que recibió hace dos años por el comportamiento tóxico y abusivo que habría desplegado en el set de grabación de Glee. Desde entonces había aparecido en un documental de HBO Max grabado con motivo del aniversario del musical Spring Awakening, en el que participó con 20 años, y poco más.
Sammie Ware, una de sus compañeras de reparto, aseguró que la actriz había amenazado con defecar en su peluca, un comentario que cobra un significado diferente si se tiene en cuenta que Sammie es una joven afroamericana, y que en general le había hecho la vida imposible.
Ese fue el empujón para que otros miembros del elenco como Heather Morris y Amber Riley rompieran el silencio para añadir que, aunque no consideraban que Lea fuera racista, sí era cierto que no resultaba agradable trabajar con ella.
Sammie Ware se pronunció ahora acerca de la incorporación de la actriz a Funny Girl acusando a Broadway de perpetuar la cultura del silencio, aunque en su caso no se arrepiente de haber compartido su experiencia.