Por muy extraño que podría parecer, Belinda no está acostumbrada a hacer dietas; sin embargo, tiene un gran secreto para mantener su escultural figura.
La cantante reveló, entre muchas otras cosas, que es de "buen diente", es decir, que come mucho, a tal grado de sufrir el famoso "mal del puerco", dijo en entrevista con la revista Vanity Fair.
Una vez que come, la protagonista de la serie Bienvenidos al Edén, debe ir a la cama a tomar una siesta.
"Después de comer, me dan unas ganas de dormir. Ya estoy con la última parte del postre y digo: 'Ay, ¿podemos echarnos una siestita?' ¡Pero no! Es cuando más hay que echarle ganas, así que otro café directamente", detalló.
Esta sensación es científicamente llamada ‘marea alcalina postprandial’ y consiste en una especie de aletargamiento del cuerpo después de consumir alimentos.
En México es popularmente conocido como "mal del puerco", pues según dicen, los cerdos se echan a dormir luego de comer.
Para la artista, es muy importante mantenerse activa, ya que, según dijo, eso es lo que le ayuda a "quemar más calorías".
"Todo me gusta, no tengo dietas. Yo creo que lo importante es estar activo durante el día porque así quemas las calorías. Obviamente trato de cuidarme y de comer 'sano', pero realmente no tengo una dieta", reveló.
Incluso, Belinda confesó que toma por costumbre levantarse en la madrugada a comer cuando no puede conciliar el sueño.
"Dicen y creo que sí es verdad, que entre más tarde cenes más engordas y a mí es cuando más hambre me da. A las 2 de la mañana me entra un hambre como de ir al refrigerador a ver qué hay", contó.
