Pese a su divorcio, América no ha cambiado la forma en la que percibe su idea del matrimonio, incluso aconsejó a sus hijas Camila y América que lo hicieran. "Mis hijas en una etapa dijeron 'no me quiero casar', y les dije que el matrimonio es una institución valiosa que da estabilidad emocional. Les dije: 'Cásense y tengan hijos dentro de un seno familiar y verán que van a estar muy contentos'. Y un día las niñas me dijeron que sí, que sí se querían casar", contó.
En agosto de 2020, Camila se casó con Franciso Barba, y en marzo del año pasado le dieron la bienvenida a su primera hija, Cayetana. En tanto, su primogénito Alex se casó en mayo de 2021 con Alexia Hernández, y están a la espera de celebrar su boda religiosa; ambos se convirtieron en padres hace unos meses.
Durante la entrevista, América abordó algunos aspectos de su vida profesional, como su faceta de arquitecta, la cual ha podido poner en práctica en varios proyectos, así como la de empresaria, sin embargo, está convencida de que su familia siempre está por encima de todo.
"Uno de mis sueños siempre fue formar una familia unida y estar con mis hijos. Me apasionan cosas muy simples: compartir con mi familia, estar con mis papás, con mis hermanas; me gusta mucho viajar y, si los viajes son en familia, me gustan aún más", comentó.
Además, reconoció que criar a sus hijos fue su misión más importante."Siempre cuidé personalmente a mis hijos. Con Alex, el primero, no necesité enfermera para sus cuidados, pero sí con las gemelas porque fueron prematuras, pero siempre estaba ahí", recordó. "Yo decía: 'Pues a dónde voy que más valga, ¡qué mejor que dedicarme a mis hijos!'. En un tiempo, cuando me separé, puse un gimnasio y me fue muy bien, pero también vi que, por más que trataba de organizarme, las cosas del negocio me absorbían y perdía tiempo con mis hijos", explicó.