La boda íntima de Kourtney Kardashian y Travis Barker se llevará a cabo mañana en la terraza asilada del Castello Brown en Portofino, Italia. Los preparativos estuvieron en marcha hoy y hubo mucho movimiento detrás de los altos muros de la romántica y antigua fortaleza.
Para evitar cualquier contratiempo los organizadores le han pedido al personal que se encarga de los preparativos de guardar el secreto y les hicieron firmar acuerdos legales, prohibiéndoles hablar sobre la boda, que ha sido anunciada como el evento del mundo del espectáculo del año.
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Aunque se esperaba que la ceremonia se llevaría a cabo en algún momento de este fin de semana, el Daily Mail aseguró que los invitados se reunirán mañana para ver a la pareja casarse, en el castillo, que una vez fue utilizado como punto de descanso para la figura histórica de Richard the Lionhear, en su camino a las Cruzadas.
El Castello Brown normalmente funciona como museo para turistas, pero todo el edificio en la cima de una colina, con vista al histórico pueblo costero cerca de Génova, fue cerrado desde el miércoles pasado, después de que las Kardashian lo alquilaran por una semana.
A medida que se realizan los preparativos de la boda, se ha revelado que una gruta de jardín íntima con extravagantes estructuras doradas desempeñará un papel clave en la boda. El increíble escenario se levantó hoy en los terrenos de una casa histórica junto a la playa cerca de la fortaleza Castello Brown, principal sede del enlace.
Gran parte de la familia Kardashian se hospeda en una casa al lado del castillo medieval y hoy se terminó de colocar una estructura de oro de casi cuatro metros de altura en forma de un enorme marco dorado o espejo, esto en un extremo del jardín debajo de la casa.
Se vio a los trabajadores colgando hojas y follaje de un marco curvo a lo largo del jardín de 12 metros de largo para crear el efecto de un escondite en el bosque. También se vieron en el lugar otros dos objetos dorados gigantes con cuencos de ala ancha en la parte superior, posiblemente les pondrán fuego para iluminar el área.
También se alinearon docenas de velas en frascos de vidrio listas para ser encendidas y colocadas en posición en lo que promete ser una escena encantadora y romántica. El jardín secreto está en la ladera debajo del castillo y disfruta de magníficas vistas sobre el Mediterráneo.
Un camino empinado que conduce a Castello Brown desde el puerto de Portofino ha permanecido abierto para que los lugareños y visitantes aún puedan acceder a la costa rocosa en el lado de la fortaleza que da al mar. Pero ahora se han colocado carteles que dicen que el camino se cerrará el domingo y se reabrirá el lunes.
Seguramente en una medida para garantizar la privacidad de los invitados a la boda. Se instalaron cámaras de seguridad para ayudar a monitorear el área y mantener alejados a los visitantes no deseados. Equipos de trabajadores fueron vistos hoy moviendo cajas que contenían equipos de sonido y bandejas con vasos y cajas de bebidas.
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Se cree que Kourtney y el baterista de Blink-182, Travis, se hospedan en el yate Regina D'Italia de 64 metros, que está amarrado frente a la costa del pueblo pesquero turístico. Se cree que la pareja será transportada al lugar de su boda en un bote auxiliar, llegando a un pequeño embarcadero privado en la cala apartada en la parte trasera del castillo.
Hoy se vio a los trabajadores colocando una alfombra plateada en los tablones de madera del embarcadero que se encuentra en los terrenos de una casa histórica al lado del castillo. Se cree que la casa actualmente está alquilada por miembros de la familia Kardashian que se quedan allí durante las festividades.
El cierre del camino mañana significará que la pareja podrá moverse entre la casa y el camino lejos de las miradas indiscretas de los turistas y los paparazzi. Pero aún tendrán que subir más de 100 escalones desde el embarcadero hasta el castillo, lo que significa que pueden cambiarse en habitaciones privadas dentro de la fortaleza romana.
Los hijos de Kourtney; Mason, 12, Reign, siete, y Penelope, nueve fueron vistos alrededor del embarcadero el viernes. Su mamá, Kris Jenner, de 66 años, quien recientemente reveló que había "jurado guardar el secreto" sobre la próxima ceremonia, fue vista de compras en el pueblo más temprano ese día.
Festejos previos
Todo el clan Kardashian, incluida la hermana de Kourtney, Kylie, de 24 años, se reunió el viernes por la noche para una comida previa a la boda en Ristorante Puny, cerca del puerto. Scott Disick, el papá de sus tres hijos no fue invitado. El hijo de Travis, de 46 años, Landon, de 18, y su hija, Alabama, de 16, ya están allí.
Se cree que la abuela materna de Kourtney, Mary Jo MJ Campbell, y el papá de Travis, Randy, no viajaron al extranjero para la ceremonia, aunque estuvieron presentes en sus nupcias por el civil.
Hoy, Kardashian y Travis dieron un paseo en barco, con sus familias en Portofino. La estrella de reality se puso un pequeño y elegante vestido también negro con un gran escote, así como una imagen de la Virgen María en un guiño a su entorno italiano, con un par de guantes de ópera.
La radiante novia se recogió el cabello hacia atrás en un moño apretado y acentuó el look con un velo negro transparente acentuado con un ribete azul cielo. Durante el paseo en bote estuvieron acompañados por Kris Jenner, Kylie y su hija Stormi,de cuatro años, así como de Kim y Khloe Kardashian, North West y Kendall con Devin Booker.